Martilleros marplatenses elevarán una queja por el registro obligatorio de los contratos de alquiler

Desde el Colegio de Martilleros de Mar del Plata anticiparon que elevarán una "queja" a la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip) por la nueva reglamentación que definió este miércoles para exigir el registro obligatorio de los contratos de alquiler en el marco de la nueva Ley de Alquileres, vigente desde julio del año pasado.

Ante la consulta que le hizo 0223, Miguel Ángel Donsini, planteó reparos al nuevo esquema que estableció el organismo que preside Mercedes Marcó del Pont y advirtió que hay "algunas cosas que están mal hechas". "Nosotros sabemos que siempre hubo que declarar los alquileres de 24 meses que ahora pasaron a ser de 36 meses. Pero en ningún momento se había hablado de los alquileres temporarios y en esta reglamentación sí se lo incluye", advirtió.

La registración de contratos de locación de inmuebles que estableció Afip a través de la resolución general 4933/2021, en base a la Ley 27.551, alcanza, en principio, a las locaciones de bienes inmuebles urbanos, pero también a arrendamientos sobre bienes inmuebles rurales, locaciones temporarias con fines turísticos y locaciones como “stands” en supermercados o shoppings, según lo que se detalló oficialmente.

Las autoridades nacionales justificaron esta decisión para obtener información que permita "verificar el cumplimiento de las obligaciones fiscales de los sujetos intervinientes”, teniendo en cuenta que, según distintos relevamientos de agrupaciones de inquilinos, una gran parte de los contratos se celebran en un marco de "informalidad".

Donsini, sin embargo, advirtió inconvenientes sobre la nueva reglamentación y confirmó que desde la institución que preside ya se solicitó "asesoramiento jurídico" para elevar en los próximos días una queja formal al organismo y tratar de rever algunos aspectos de la nueva normativa que entrará en vigencia a partir del 1 de marzo. "Resulta incomprensible porque no se planteó en la ley", insistió.

"Vemos que este tipo de cosas responden a dificultades que van trayendo para que la gente se vuelque cada vez menos al mercado inmobiliario. Más impuestos, más cargas, más problemáticas, y todo eso genera dificultades a futuro que quizás provoquen que la gente se vuelque a invertir en otro tipo de cosas", señaló el empresario, y agregó: "Veremos sobre la marcha cuál va a ser el impacto de esta reglamentación".