Cristina: "Voy a hacer lo que tenga que hacer para que haya un proyecto que nos devuelva la alegría"

La vicepresidenta reapareció en un plenario de la UOM y dejó muchas definiciones. Bancó a Massa, criticó la carga que sufren los trabajadores con el impuesto a las Ganancias y pidió reconstruir el "acuerdo democrático" de 1983. "Hubo una Argentina donde los trabajadores podían ahorrar y eso fue hace poco", sostuvo. 

La primera postal de Cristina en un acto político tras meses de silencio. Foto: archivo 0223.

4 de Noviembre de 2022 17:11

Por Redacción 0223

PARA 0223

“Voy a hacer lo que tenga que hacer para lograr un proyecto de país que devuelva la alegría a nuestra gente”. Así, casi en tono de candidata presidencial, cerró su discurso este viernes por la tarde Cristina Fernández de Kirchner, al participar del plenario que organizó la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) en Pilar.

En gran parte del primer discurso que dio en público tras el intento de asesinato que sufrió el 1 de septiembre a metros de su casa en Recoleta, la vicepresidenta pidió reformar el esquema que somete a millones de trabajadores al pago del impuesto a las Ganancias. “El salario tiene que volver a pagarse de acuerdo a la productividad”, sostuvo.

“Hoy los que se llevan la productividad, los que ponen los precios en los supermercados, pagan muchos menos de Ganancias que cualquier trabajador ¿Y por qué? Por una razón muy sencilla: a un trabajador que supera el tope de Ganancias, le aplican la alícuota del 35 por ciento. El trabajador no tiene posibilidad de dibujar el salario como sí lo hacen las grandes empresas con sus balances”, apuntó.

Sin eludir las críticas a la gestión del presidente Alberto Fernández, Cristina aseguró que “nunca hubo una participación tan baja de los trabajadoras en el PBI como la que estamos teniendo hoy” aunque también remarcó que este proceso constante de pérdida de poder adquisitivo se inició con la llegada al poder de Mauricio Macri en 2015.

“Hubo una Argentina donde los trabajadores podían ahorrar y eso fue hace poco. Hay que volver a reconstruir los sueños que nos arrebataron a través de promesas que nunca se cumplieron”, dijo la exmandataria, quien garantizó: “Saben que yo voy a hacer lo que tenga que hacer para lograr que nuestro pueblo y nuestra sociedad pueda organizarse en un proyecto de país que devuelva la ilusión, la fuerza y la alegría a nuestra gente.

Al concluir su discurso, Cristina insistió: “Éramos un pueblo alegre. Los recuerdo aquel 9 de diciembre del 2015 en Plaza de Mayo, y éramos alegres. Volvamos a recuperar la alegría de que el sueldo alcanzaba, de ir al trabajo, de que había futuro. Nos merecemos esa alegría”.

"Se tiene que eliminar la violencia de Argentina"

La vicepresidenta llamó a los distintos actores dirigenciales a reivindicar el "acuerdo democrático" que selló el gobierno de Raúl Alfonsín en 1983, una vez finalizada la última dictadura cívico militar. "Necesitamos un acuerdo democrático donde cual la violencia, una forma de hacer politica en el agravio, el insulto y en desear la supresión del otro, se elimine. Esto fue la Argentina de 1983. Es necesario volver a reconstruir el acuerdo democrático donde las diferencias no pueden solucionadas a través de la violencia", apuntó.

También la expresidenta habló de "la necesidad de un consenso económico en donde podamos discutir en la mesa, no solo los partidos políticos sino también los sindicatos y centrales empresarias, el modelo país y cómo vamos a llevar una economía bimonetaria". "El dólar, las devaluaciones, los procesos inflacionarios, tienen que ser puestos en la mesa de discusión y negociación. No basta con llegar a discutir el salario porque sino ninguna paritaria es la solución", consideró.

"Cortenla con la de los indignados rentados"

A pesar de las críticas implícitas a la gestión de Fernández, Cristina se pronunció con un fuerte respaldo a Sergio Massa, el hombre que quedó confirmado en el Ministerio de Economía tras la repentina renuncia de Martín Guzmán: "Nunca miento. Puedo tener muchos defectos pero no soy mentirosa. Y la verdad es que el ministro de Economia está haciendo un gran esfuerzo administrando las consecuencias de lo que pasó".

La vicepresidenta tampoco evitó hablar del atentado que sufrió el 1 de septiembre y confesó que en este tiempo no se pudo "sacar de la cabeza" las imágenes del ataque fallido en manos del ciudadano brasileño Fernando Sabag Montiel. "Hoy se cumplen dos meses y tres días de eso que todos vivieron por la televisión. Yo también lo vi por ahí. En el momento no me di cuenta del arma que empuñaron y que, en los hechos, pretendía volarme la cabeza. Yo por suerte no lo vi pero en estos dos meses y tres días lo que no podía sacarme de la cabeza, ni aún hoy, es que hubiera pasado si hubiera gatillado", declaró al comienzo.

"Creo que algunas cosas positivas de un hecho tan horrible y espantoso podemos obtener. Y la primera conclusión buena que saqué fue que esos presuntos indignados e indignadas que agredían e insultaban y que tiraban velas encendidas a la Casa Rosada no eran indignados sino gente pagada por empresarios que se identificaron con el macrismo. Cortenla con la de los indignados rentados, que no va más en la República Argentina", apuntó.

Fernández de Kirchner se mostró escéptica con que haya grandes avances en la causa y aprovechó para volver a atacar al Poder Judicial. "La Justicia no va a investigar nada. Ya estoy resignada. A ellos les sirvo de acusada pero no de víctima", sentenció.

El acto de la UOM en Pilar se desarrolló un día antes del congreso partidario que tiene previsto realizar el Partido Justicialista este sábado en Mar del Plata. Una de las principales figuras que ya confirmó su participación para el cierre es Máximo Kirchner, el hijo de Cristina y actual titular del PJ bonaerense.