Los 5 lenguajes del amor

Es muy común que si damos amor con determinado lenguaje, naturalmente esperemos que el otro lo devuelva de la misma forma porque esa es mi manera de contarte cómo entiendo yo el amor. Aunque en algunos casos puede pasar que no coincida.

Según Gary Chapman, reconocido consejero matrimonial y escritor estadounidense, existen 5 lenguajes del amor que engloban las formas en las que cada persona tiende a expresar sus sentimientos.

1. Verbalizar: Expresar amor con palabras. Puede ser resaltar una habilidad de tu pareja, agradecerle algo que hizo, apoyarla, elogiar a la persona. Esto vale siempre y cuando sean palabras sinceras. Por ejemplo: “Te quiero muchísimo”, “Me encanta cuando me explicas las cosas tan bien”.  
2. Tiempo de calidad: Compartir actividades, dándole atención a esa persona y disfrutando ese momento juntos. (No de compromiso o con la cabeza en otra cosa). La calidad está en el disfrute de compartirlo con esa persona; escuchando y siendo escuchados, sin estar apurados, sin estar tan pendientes del celular. Que no haya otro objetivo más que ese. 
3. Regalos: No hablo de regalos caros. Muchas veces vale más que sean personalizados, hechos por la propia persona o comprado esfuerzo. Puede ser una flor, un chocolate, una cartita, pequeños detalles para demostrarle a la persona que estuve pensando en ella y quiero agasajarla.  
4. Actos de servicio: Hacerle favores a la otra persona y que eso te gratifique. Darle tu tiempo, esfuerzo y trabajo para esa persona.  Arreglarle alguna cosa, ayudar con algo del trabajo, llevar a la persona a algún lugar que necesite. Se hace con amor no porque sino se va a enojar; no hay que sentirlo como una necesidad u obligación sino como un acto de generosidad.
5. Contacto físico: Es la forma de comunicación más sencilla y directa. Abrazarse, besarse, acariciarse, tocarse. Para muchas personas el contacto físico es su lenguaje principal y les genera mucha seguridad. 

Conocer, identificar y compartir las distintas formas de amar es una gran ayuda para comunicarnos. Podés preguntarte, entonces: ¿Cómo expreso mi amor? ¿Cómo me gusta recibirlo? ¿Reconocés con qué lenguaje te identificas más?