Incorporan la formación sobre perspectiva de género y salud mental a la carrera de Psicología

A partir de ahora, los estudiantes de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Mar del Plata tendrán una formación específica sobre la Ley de Salud Mental y la perspectiva de género, decisión que supone un gran avance para la casa de altos estudios. En concreto, el Consejo Académico de la Facultad aprobó por unanimidad nuevo Reglamento de Seminarios de Orientación por el cual se incorporan al plan de estudios la formación obligatoria de los estudiantes de grado 50 horas destinadas a Salud Mental Pública y Comunitaria, Derechos Humanos y Ámbitos Psicológicos y otras 50 sobre Perspectiva de Género y Ámbitos Psicológicos. 

“Creemos que éstos contenidos son imprescindibles para un ejercicio profesional comprometido éticamente con la realidad social”, destacaron las autoridades universitarias. Para Julieta Filippi Villar, vicedecana de la Facultad de Psicología, esto supone “un enorme avance” porque, si bien las y los docentes de Psicología abordan la Ley de Salud Mental de manera informal, ahora será obligatoria.

“Esto va a permitir poder pensar la salud mental desde un abordaje interdisciplinario e incorporar los aspectos de prevención y promoción de la salud, porque estamos acostumbrados a hablar cuando un hecho ya aconteció. Lo que buscamos es poder poner en foco a la salud mental como un bien colectivo que hay que cuidar tanto como la salud física, y poder trabajar a tiempo con los indicadores que vayan apareciendo a lo largo de la historia evolutiva de la persona”, precisó la profesional en diálogo con 0223.   

Al mismo tiempo, Filippi Villar advirtió sobre la importancia de que “estas transformaciones sean acompañadas en otros ámbitos”, e hizo hincapié en lo que sucede, por ejemplo, en la Justicia. “Vemos, sobre todo, en casos de violencia de género fallos que van en contra de todos los avances que se fueron dando en relación a las legislaciones vigentes”, subrayó.

Además, mencionó que hay en vigencia “un modelo manicomial hegemónico que promueve que, ante la conducta peligrosa, aparezca el encierro” y que la ley de Salud Mental apunta a trabajar en materia de contención para “evitar las internaciones crónicas, que es el modelo que se trabaja históricamente”.