Negaron salidas transitorias y le dieron un régimen semiabierto al asesino de Melina Briz

Una no, una sí. Así podría resumirse la decisión que la Justicia de Ejecución Penal tomó para Ariel Troncoso, el hombre que hace once años y medio mató a la joven Melina Briz en la ciudad de Balcarce: si bien le negaron las salidas transitorias solicitadas por la defensa, se le concedió el ingreso al régimen semiabierto “Casas por cárceles”.

En la misma resolución, el Juez Juan Galarreta ordenó el inicio de un tratamiento psicológico para el sujeto que ahorcó, le cortó las muñecas a la joven, tiró su cuerpo en descampado a la vera de una ruta tras dejarla desnuda, tirarle cal en el rostro y taparla con pasto y ramas.

Tras el hecho cometido en febrero de 2012, Troncoso –que le llevaba 22 años a la víctima- fue a ver un partido de fútbol y envió algunos mensajes de texto para despistar a la autoridad judicial. Si bien en un momento se había declarado la nulidad de su detención, tras la revocación del Tribunal de Casación, se lo juzgó y condenó a 18 años de prisión en abril de 2015.

La abogada Adelina Martorella sostuvo en la audiencia que se realizó en Tribunales que la conducta que tuvo Troncoso “es de las más deleznables en el abanico de delitos de nuestra legislación y que ese es el punto de partida para analizar la vida carcelaria que transita este sujeto” y que “no se trata de aplicar, cual autómatas, los plazos que consagra la Ley de Ejecución Penal”.

“También aquí se trata de ver cuál es el resultado de la prevención especial (ya sabemos que la prevención general no funcionó), teniendo en cuenta que desde el Servicio Penitenciario se le brindaron y se le brindan a este sujeto todas las posibilidades para una sincera rehabilitación, pero ignoró a todas y cada una de ellas”, agregó.

Si bien el magistrado rechazó el otorgamiento de salidas transitorias, ante la decisión de otorgar el ingreso al sistema semiabierto, la profesional y el Ministerio Público Fiscal apelaron la decisión.

“Nada aprendió ni internalizó del resultado de su conducta delictiva”

En su oposición al pedido, Martorella planteó que sería un problema serio “minimizar la vida de una joven de 18 años que no tuvo todas las oportunidades que tiene este sujeto” y que si solamente se valora que no registra sanciones disciplinarias, “caeremos en lo que su personalidad es: un manipulador”.

La profesional cuestionó el informe de desempeño institucional en todas las áreas: deporte, actividades laborales, estudios, formación técnica y oficios, médico, psicológico, de visitas, ambienta socio familiar y el integral.

Martorella recordó qué a comienzos de junio, el Departamento Técnico Criminológico estimó inconveniente “incluír al condenado Troncoso en el régimen de salidas transitorias y régimen abierto”.