Incendios en Córdoba en primera persona: "La gente arriesgó su vida"

A casi una semana del inicio de los incendios en la provincia de Córdoba, el periodista Francisco Montorvino contó en exclusiva a 0223 cómo atraviesan la situación en uno de los lugares más afectados: Capilla del Monte.

Lo que para muchos parece lejano y sólo se aprecia a través de las cámaras de televisión y posteos en redes sociales, para otros es una realidad diaria que los afecta cada vez más. "El foco sigue activo pero ha disminuido bastante. En este momento está cerca de dique El Cajón y, aunque está bastante controlado por el cese del viento, hay temor por lo que vaya a pasar", relató Montorvino.

Este martes se avanzó en el control del camino ancho entre Capilla del Monte y San Marcos Sierra, lo que generó un alivio en la población. En total, más de 100 personas fueron afectadas en la localidad del periodista y más de 20 viviendas han quedado destruidas en la zona.

"La verdad es que todos los años pasa lo mismo, tanto con los incendios como con la sequía; es algo que estamos acostumbrados", reconoció y subrayó que se intensifica entre agosto y octubre. 

"La gente que tiene campo y no tiene construcción, aprovecha y se ahorra unos pesos; en vez de desmontar todo y que crezca con la lluvia, prende fuego para que el terreno quede liberado. Es algo que lamentablemente pasa siempre, pero este año hubo algo inesperado, que fue el viento", narró Montorvino.

En ese sentido, destacó el trabajo de los bomberos y los vecinos que "arriesgaron su vida": "Fue terrible. Había gente con zapatillas comunes, un barbijo y un balde, que se metió en lugares impensados a ayudar. 

Por su parte, señaló que en la localidad crecen las críticas hacia el desempeño de la Etac (Equipos Técnicos Anti Catástrofes), una fuerza especial paga que se hace cargo de este tipo de situaciones. "Actuaron mal, porque las condiciones no estaban dadas para hacer cortafuegos por el viento. Hay mucho enojo también con las autoridades del pueblo y el gobernador de Córdoba, Martín Llaryora por la falta de prevención".

Ese aspecto es el eje de los principales cuestionamientos, en especial con el accionar del primer incendio el pasado miércoles, en el que los bomberos hicieron una guardia de cenizas, sabiendo que el jueves iba a haber mucho viento, con altas probabilidades de que las cenizas se levanten y vuelen para generar otros focos. "Otra falla fue la de los aviones hidrantes, que no se acercaron rápidamente sino que se esperó hasta el día siguiente. Entonces todo se podría haber solucionado antes", lamentó el periodista.

Si bien es el primer día con cierta calma, no está todo resuelto. "Llega a venir un poco de viento y vamos a volver a la misma situación en pocas horas. Esto puede cambiar drásticamente", dijo Montorvino.

Finalmente, el capillense hizo hincapié en el agradecimiento al esfuerzo de la gente que asistió a los bomberos y ayudó con lo que tenía. "La participación de todos fue fundamental: hubo personas recolectando agua de sus piletas y casas, poniéndolas en bidones, haciendo grupos de WhatsApp o Facebook para que quienes vayan a combatir a voluntad tengan agua. Con lo que hay no alcanza, y el acompañamiento de todos es crucial", enfatizó.