Pesa 300 kilos y vive una situación desesperante: “Necesito que un médico me ayude”

Leonardo Hugo Spinelli tiene 49 años y padece obesidad mórbida con todas las complicaciones que acarrea esta condición. Desde hace meses ya no puede desplazarse por sus propios medios ni siquiera dentro de su hogar y atraviesa una situación económica acuciante: él y su familia viven de los ingresos generados por su pequeño puesto de venta de frutas y verduras y la pensión por discapacidad que lo otorgaron por su condición clínica. Por eso pide ayuda para lograr finalmente la ansiada operación bariátrica que mejoraría su calidad de vida de manera radical.

“Necesito que un médico me ayude”, dice el hombre al tiempo que indica que depende de su familia para todo. “Lo poco que caminaba de la cama al comedor ya no lo puedo hacer, estoy asistido por mi mujer todo el día y ella no puede trabajar, porque tiene que estar conmigo. La verdulería que pusimos la atiende mi hijo y las ventas cayeron bastante”, explica.

“En Mar del Plata tenemos un gran sistema de salud pública que abarca casi todas las áreas, menos la obesidad. Me vio una nutricionista que me dio una dieta para que baje 80 kilos y así pueda comenzar el tratamiento para la cirugía, pero por el estrés de la situación no puedo bajar de peso”, dice el hombre que además, estuvo bajo acompañamiento psicológico.

Debido a las complicaciones de base, no hay una obra social que lo tome como paciente y por eso debe recurrir a un método de internación e intervención privado. “Hice tratamientos  en la clínica Colón, en enero viajé a Entre Ríos a que me vea un médico allá que me dijo lo mismo que los médicos de acá", expresó Leonardo que, desde el año pasado busca ingresar a la clínica de nutrición y salud del doctor Alberto Cormillot.

“El tratamiento en Buenos Aires con diez días de internación cuesta 9 mil dólares. En la clínica me explicaron que puedo gestionar un recurso de amparo, pero para eso, tengo que haber ingresado como paciente y para ingresar tengo que pagar esos diez días”, explica el hombre que ya no sabe dónde recurrir para obtener ayuda.

“Con rifas pude juntar algo de plata que se me fue en abogados sin ningún resultado”, señala Leonardo.

La salud de Leonardo se deterioró de manera meteórica. Trabajaba en una carnicería como despostador hasta que se lesionó y debieron operarlo por una hernia abdominal. La operación que le realizaron en la clínica avenida no fue exitosa y comenzó la debacle. “En cuatro meses engordé 100 kilos y renuncié al trabajo porque no podía estar parado en el mostrador, no me entraba la ropa", contó.

El año pasado llegó a los 288 kilos, dejó de caminar y comenzó a ser asistido por su familia. Este año, los problemas aumentaron al incremento de peso que hizo que quede completamente postrado en la habitación de su casa del barrio Malvinas Argentinas se sumaron las complicaciones económicas.

Quienes quieran colaborar económicamente con Leonardo pueden realizar una transferencia al alias cesta.molde.balcon (Valeria Verónica).