Cambio de aula para el alumno armado y patrullero en la puerta: la Escuela 58 volvió a clases en un clima de tensión y alerta

El lunes, la tranquilidad del día a día en la Escuela N°58 se rompió por un buen tiempo. Es que un adolescente de 16 años fue armado a clases, en el edificio de Lebensohn al 6800, en el barrio El Martillo, y el episodio siguió en los días posteriores con amenazas a grupos de WhatsApp y por las redes sociales desde una cuenta anónima contras los compañeros, por haber llamado a la policía.

Este viernes, luego de que las clases fueran suspendidas y tras el paro del jueves, el regreso al colegio se dio en un clima de mucha tensión y preocupación, con una reunión pautada para las 10 de la mañana entre los padres de los alumnos junto al director de la escuela, que llevaba apenas horas en su cargo cuando se desató el escdpandalo que tuvo repercusión nacional, inspectoras y otros equipos de trabajo.

A los padres se los citó informando que ya se había acordado con la comisaría de la zona tener un patrullero en la puerta de la institución, y que se había tomado una medida para que el alumno que fue armado, al que se le sigue una causa pero no se lo puede expulsar del colegio, y su curso de cuarto año fueon trasladados de edificio de manera definitiva para no compartir los recreos con los chicos de la primaria.

"Desde mi punto de vista hubo, por supuesto, opiniones cruzadas, hubo padres que estuvieron directamente involucrados en el conflicto y es entendible también su postura de querer que todo se resuelva ya y de manera urgente. Pero yo me voy conforme, dentro de todo, con el director nuevo que tenemos. Lamentablemente se viene a encontrar con esta situación. Es un director que empezó el lunes y viene a recibir su cargo de este modo que es tan lamentable. Pero, bueno, con esperanza de que las cosas se vayan acomodando de a poco, con el esfuerzo de toda la comunidad, de los padres. Estuvieron todos dispuestos a tomar cartas en el asunto y es cuestión de esperar desde acá en adelante a ver cómo se van dando las cosas", dijo en la puerta del colegio Miriam, madre de una alumna de la Escuela 58. 

"Mi nena va al ciclo inferior, está en segundo año. Esto se dio en el ciclo superior, con chicos más adolescentes, más grandes. Es preocupante. La violencia se está viendo reflejada en todos los ámbitos de la sociedad. Lamentablemente se está presentando cada vez más en las escuelas. Van a tomar cartas en el asunto las autoridades que corresponden. Nosotros, como padres, como comunidad, nada más podemos estar atentos y acompañar este momento, deseando que realmente todo se acomode y que podamos volver a la normalidad. La semana que viene vamos a tener tres días de clase por Semana Santa, de acá en adelante veremos cómo sigue todo", dijo a los medios con peocupación y esperanza.

Quienes asistieron a la reunión no saben si de la misma participaron los padres del alumno que fue armado al colegio, incluso algunos ni siquiera saben quién es el adolescente de cuarto año que desató el escándalo, pero confían en que "la cúpula del Consejo Escolar y los inspectores que se presentaron son los que tienen el protocolo a seguir. Y supongo que deben estar capacitados para llevar adelante esta situación y poder dar la respuesta que necesita la comunidad. Sabrán cómo manejarán las cosas. Nosotros como padres tenemos que acompañar y ver cómo se va a dar todo". 

Sin embargo, Marcela, mamá de otro alumno del colegio, no se fue tan satisfecha por lo que dijeron en la reunión con las autoridades y por la presencia del adolescente en clases. "Viene el alumno de vuelta y la policía, qué sé yo, no sé. La verdad no se llegó a ninguna conclusión. No nos queda otra que seguir mandando a nuestros hijos al colegio. Pero con temor, porque el chico va a seguir viniendo. Yo me enteré de lo que pasó el lunes acá en la puerta, cuando vine a retirar a mi hija, ahí me encontré con todo, porque nadie me avisó nada".