Pidieron que sigan detenidos los sujetos que extorsionaban a tres ancianas y le apedreaban la casa para exigirles dinero

Los dos sujetos que integraban un grupo más numeroso que amenazaban de manera reiterada a tres ancianas para que les dieran dinero, alimentos y les apedreaban la casa cuando no lo obtenían se negaron a declarar este miércoles en Tribunales y fueron trasladados nuevamente a la Unidad Penal N°44 de Batán.

Tras entrevistarse con miembros de la defensoría oficial N°10 los dos sujetos de 30 y 32 años no quisieron dar su versión de los hechos ante el fiscal de Flagrancia Facundo De la Canale que les imputó el delito de extorsión.

Al término de la audiencia que se hizo en el primer piso de Tribunales, el fiscal le pidió a la Justicia de Garantías que convierta la aprehensión en detención y que ambos sujetos sigan alojados en el complejo penitenciario de Batán al menos hasta la audiencia de excarcelación que sería la próxima semana.

Tal como se informó, el pasado 23 de mayo la mujer que atendía a las víctimas de 87, 90 y 92 en su casa de Garay al 2800 denunció que un grupo de personas en situación de calle le exigían dinero y alimentos y que tiraban piedrazos a la casa si no lo hacían. Tres días antes de la denuncia y de acuerdo a lo registrado en las cámaras de seguridad provocaron daños en el frente de la casa.

El 3 de junio personal del Gabinete Técnico Operativo de la comisaría segunda y de la Patrulla Municipal aprehendió a dos sujetos que junto a otros que no fueron identificados y habían amenazado con romper el auto de la denunciante.

"Hace dos años que ellas son víctimas de un acoso de delincuentes que las torturan y las amenazan, pidiéndoles dinero. Si ella no les da, la amenazan que van a matar a sus hermanas, que van a entrar y van a romper todo, es más, rompen todo, rompen los vidrios, rompen los techos, es la cuarta vez que las chicas cambian las tejas de la casa", contó la cuidadora.

"Ellas en una época les han dado limosna, han ayudado a chicos que estaban en la calle, pero hoy ya son como 20 ó 30 que vienen a pedir amenazándolas, hostigándolas que si no les dan, rompen todo, que si no les dan rompen el coche que está en la colchera, le mato a la enfermera, es una cosa terrorífica, es muy grave", explicó, y aseguró que recorrió varias instituciones hasta que pudo conseguir que los agresores fueran detenidos.

La cuidadora de las mujeres dijo que además de ser víctimas de los agresores, ellas recibieron críticas de los propios vecinos por haberles dado plata y ayuda a quienes golpean la puerta de su casa buscando limosna: "Los vecinos las han denunciado a las señoras, pero ellas no son culpables. Ellas son víctimas, los vecinos no entienden eso. Los vecinos las culpaban de ayudar a gente en situación de calle. Porque los chicos, no sé cómo decirlo, los delincuentes, vienen acá, roban a los vecinos, le mataron los perros a uno porque los perros cada vez que ellos estaban acá ladraban, entonces los envenenaron. Y duermen por acá. Los vecinos saben todo".