El joven que baleó a su novia y mató al perro declaró que los animales “eran unos demonios”

Noel Budeger declaró más de una hora. Sostuvo que tuvo miedo y que vio un mensaje satánico. Las pericias psiquiátricas se harán a mediados de febrero.

27 de Enero de 2017 14:09

Por Redacción 0223

PARA 0223

Nueve días después de haberle disparado dos veces a su pareja, de matar al perro de la joven y de intentar suicidarse, Noel Budeger declaró más de una hora y media en Tribunales. Acompañado por la abogada Patricia Stadler, el joven de 25 años dio un relato de ribetes satánicos, dijo que sintió miedo, que creyó que los animales "eran unos demonios" y que solamente recuerda cuando se disparó en el cuello.

Si bien el imputado de homicidio agravado en grado de tentativa dio una declaración minuciosa de los momentos previos al ataque, luego perdió precisión y dijo no recordar el instante en que tomó el arma, mató a la perra y le disparó dos veces a Micaela López. En su relato al fiscal Alejandro Pelegrinelli resaltó que estaba leyendo unos textos en internet, que comenzó a tener miedo y transpirar cuando reconoció "un número satánico en la pantalla".

"En su extenso relato fue salpicando cosas, se dispersó y conectó de a ratos antes de decir que en el estado en que estaba sintió que los perros eran unos demonios", confió una de las fuentes judiciales consultadas por 0223.

Tal como sospechaban los investigadores, hay dos claves para entender lo que sucedió esa madrugada en la casa ubicada en Aguado al 1700. Una será la versión que pueda dar a futuro la víctima, que sigue evolucionando lentamente pero que no está en condiciones de declarar. La otra serán los informes de las pericias psicológicas y psiquiátricas que se le practicarán al imputado a mediados de febrero.

Budeger no registraba antecedentes penales, no había sido denunciado con anterioridad ni estaba medicado y reconoció que esa noche había fumado un cigarrillo de marihuana cuando regresó al inmueble. En el tramo final de su declaración reiteró que amaba a su pareja, que tenían un viaje planificado al exterior para el mes de mayo y que tenían el arma utilizada -un revólver calibre .22- por motivos de seguridad.

Tras cumplir con el trámite, Budeger fue trasladado nuevamente a la Unidad Penal 44 de Batán.