La fiesta de Rusia fue completa en el arranque del Mundial

Ni el local se imaginaba disfrutar de esa manera. Una ceremonia inaugural sencilla, con Robbie Williams como figura, con la presencia del fenómeno Ronaldo, y luego un partido en el que el dueño de casa se floreó y aplastó a la débil Arabia Saudita por 5 a 0.

14 de Junio de 2018 13:56

Por Redacción 0223

PARA 0223

No hubo equivalencias. No porque Rusia haya sido una máquina futbolística ni mucho menos. Es más, no dejó el local una sensación de equipo que esté preparado para pelear hasta instancias decisivas. Sin embargo, Arabia Saudita no estuvo a la altura, insinuó en el arranque con un buen juego de posesión pero nula profundidad y después fue sometido por el dueño de casa que aprovechó todas sus ocasiones, con una gran actuación de Aleksandr Golovin y el oportunismo de Denis Cherysev, que ingresó en la primera parte por la lesión de Dzagoev y terminó siendo la figura descollante del 5 a 0 que puso en marcha el Mundial 2018.

Hasta el primer tanto del local, nada hacía imaginar que podía terminar de esta forma. Porque se veía que era más peligroso, pero le costaba agarrar la pelota ante un buen toqueteo de los dirigidos por Juan Antonio Pizzi. Pero esas insinuaciones se terminaban en tres cuartos de cancha y no lograba llegar peligro. Del otro lado, lo contrario, con mucha menos posesión, tuvo mucha efectividad. A los 12', en una segunda pelota tras un córner, se descuidó la defensa y Yuri Gazinszky apareció por el segundo palo para meter el cabezazo que abrió el marcador. Con eso, Rusia ganó en tranquilidad, dejó que Arabia tocara y cuando lo presionaba se la quitaba con facilidad. El ingreso de Denis Cheryshev por Alan Dzagoev, que se lesionó solo en un contra ataque, fue lo que terminó de inclinar la balanza. Porque el volante ofensivo del Villarreal se destacó, se equivocó en no dar el pase atrás en la primera que tuvo en el área rival y, en la siguiente, recibió, se sacó de encima dos defensores con un toque sutil, se acomodó para la zurda y le rompió el arco a Al-Mamuaiouf para poner el 2 a 0 camino al vestuario.

Las intenciones de devolver a su equipo al juego en el vestuario, no le dieron demasiado resultado a Pizzi. Los "Halcones Verdes del Desierto" buscaron por todas las vías llegar al descuento, pero la falta de poder ofensivo fue muy notoria. Y otra vez, con poco, Rusia siguió estirando la cuenta. El juego aéreo volvió a ser la carta, la pegada de Golovin y el cabezazo de Artem Dzyuba selló sepultó las esperanzas de Arabia y desató la fiesta rusa en el imponente Luzhniki. Para que la fiesta sea completa, en el final hubo dos joyas. En tiempo de descuento, Cheryshev le arrebató el premio de mejor del partido a Golovin con una exquisita definición con la parte externa del pie, al ángulo izquierdo. Al mismo lugar, fue un minuto más tarde el tiro libre del joven del CSKA de Moscú, que es pretendido por los grandes de Europa. Atrás de eso, vino el pitazo del argentino Néstor Pitana, que tuvo el honor de dirigir el primer partido del Mundial y que no tuvo problemas en la conducción ni acciones polémicas.

La primera jornada del Grupo A la cerrarán el viernes a las 9 de nuestro país, Uruguay y Egipto, dos de los candidatos a avanzar a octavos de final, que ahora tendrán más presión por la victoria y los goles de Rusia.