El clásico se empezó a jugar en el Torreón

La Copa "Banco Provincia" se presentó en sociedad con la presencia de los presidentes, entrenadores y jugadores de Peñarol y Quilmes.

Los representantes de los equipos junto a Guillermo Montenegro y Nicolás Lauría. (Foto: Prensa Peñarol)

20 de Septiembre de 2019 20:05

Por Redacción 0223

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"La ciudad no se merece no tener el clásico" y "el clásico es lo más lindo que hay", fueron las dos frases que más veces retumbaron en el Torreón del Monje, donde se llevó a cabo la presentación oficial de la Copa "Banco Provincia", trofeo que se pondrá en juego el domingo a las 20 en el Polideportivo "Islas Malvinas" entre Peñarol y Quilmes, en el encuentro más apasionante que ofrece el básquet nacional. Con el "milrayitas" en la Liga Nacional y el "tricolor" en la Liga Argentina, no habrá cruce oficial pero al menos se organizó este amistoso.

La presencia de Gabriel Piccato, sin dudas, fue la gran atracción de la tarde. Porque el ahora técnico de Peñarol, recién llegado a la ciudad, viene de ser uno de los asistentes de Sergio Hernández en el Mundial de China, fue parte importante de la preparación de cada partido y formó parte del plantel que logró un subcampeonato inolvidable. Por eso, antes de comenzar la conferencia de prensa, el presidente albiazul, Domingo Robles, lo felicitó y despertó el aplauso de todos los presentes, entre los que se encontraban el candidato a intendente por Juntos por el Cambio, Guillermo Montenegro, y el candidato a primer concejal, Nicolás Lauría, hombre del básquet, exPeña y actualmente en Unión para el Torneo Federal.

En la mesa principal, además de Robles y Piccato, estuvieron el presidente de Quilmes, Jorge Unzué y el entrenador Manuel Gelpi, además de un representante de cada equipo: Patricio Tabárez del conjunto del Materno y Gregorio Eseverri del "cervecero". 

El primero en tomar la palabra, luego del reconocimiento, fue Robles, que remarcó que "nos parecía que no merecía la ciudad no tener por lo menos un clásico, ya que es el partido más importante de la Liga Nacional. Es lo mejor que tenemos los marplatenses en cuanto al deporte profesional, más allá de que hoy nos toque estar en distintas categorías", continuó el máximo dirigente de Peñarol. Además, señaló que "también pensamos que es un buen momento para presentar a los planteles, que para esta temporada los tenemos renovados los dos. Hicimos un sacrificio y pusimos en marcha la organización de este partido tan lindo para el amante del básquet".

En tanto, Unzué ratificó lo dicho por su colega y agradeció "a la Provincia y la Municipalidad por el apoyo para que esto se pueda hacer. Tenemos que demostrar que no hace falta estar en la misma categoría para que siga vigente el clásico más importante del básquet argentino. El domingo se vivirá una fiesta en el Polideportivo".

Recién llegado de China y apenas un par de horas antes de tener la primera práctica junto a sus jugadores, Piccato tiene en claro lo que quiere y reconoció que sus jugadores "tienen que proponer un buen espectáculo. Más allá de ser un amistoso y un clásico, tiene que servir para que los hinchas vean un lindo partido de básquet". Y si bien no es por los puntos y será la primera medida para los dos en la pretemporada, aseguró que "cuando hay dos equipos enfrentados ya es competencia, hay factores que son distintos a los de un entrenamiento y eso nos va a servir. Será nuestro primer ensayo".

Por el mismo camino fue el joven entrenador "tricolor", pero no se salió del eje de la preparación. "Somos conscientes que estamos en un momento de preparación y queremos conseguir que el equipo agarre el ritmo que nosotros pretendemos. Es un clásico y modifica el ritmo normal, pero nosotros apuntamos al inicio de la temporada y aprovecharemos para pulir cosas y que sea un buen espectáculo para que todos disfruten".

En cuanto a los jugadores, se vivió una situación diferente. Por un lado, estuvo Patricio Tabárez que vivirá un clásico por primera vez. "Cuando vine lo primero que me dijeron fue que no iba a haber clásico y era una lástima. Por suerte surgió esta posibilidad y voy a poder vivirlo", señaló.

Distinto es para Gregorio Eseverri, porque ya pasó por el club, tuvo la oportunidad de enfrentarse a Peñarol y sabe lo que significa este partido, por más que sea amistoso. "Es una alegría muy grande que se juegue este partido, el clásico es lo más lindo que hay", remarcó "Goyo", que se vuelve a poner la camiseta de Quilmes.