En pocos días operan del corazón a su hijo y se están por quedar en la calle: necesita ayuda

La mamá de un paciente electrodependiente de 28 años años atraviesa un momento de gran preocupación e incertidumbre ya que, a pocos días de que operen a su hijo -será sometido a una cirugía cardiovascular, la práctica número 61 desde que nació-, se están por quedar en la calle. Es que la propietaria que alquila Julieta Torres, que además es madre de otros dos chicos, aumentó el valor del inmueble y para ella es imposible hacer frente a ese costo, ya que su salario como trabajadora de la salud es de apenas 18 mil pesos.

Si bien en las últimas semanas trató de llegar a un acuerdo con la propietaria, la realidad es que no tiene manera de afrontar la suba del alquiler y a mediados de junio deberá desalojar la propiedad. “Hoy, para entrar a cualquier departamento, necesito no menos de 140 mil pesos, algo imposible para mí en este momento”, dijo este miércoles la mujer a 0223, quien se mostró desesperada porque desconoce qué será de la suerte de sus hijos y la suya propia a partir de esa fecha.

Santiago, su hijo mayor, padece hidrocefalia, insuficiencia cardíaca y respiratoria, epilepsia refractaria, atrofia muscular espinal, trombofilia genética; sufrió dos ACV y fue trasplantado de un riñón, por lo que recibe asistencia médica las 24 horas. Sus múltiples patologías obligan a Julieta a vivir en la zona del centro, en cercanías de las clínicas Colón y Pueyrredón, ya que allí el joven tiene atención médica. “Si me voy a la zona de El Faro o, incluso, más lejos, hay alquileres mucho más baratos, pero si Santi se descompensa, no llega con vida a la clínica”, contó la mujer al explicar los motivos por los cuales necesita conseguir un lugar en el centro de Mar del Plata.

Torres, que trabaja como enfermera en un hospital de San Francisco Solano, razón por la que todas las semanas debe viajar para cumplir con sus 36 horas de guardia y volver, aseguró que sólo recibe asistencia alimentaria semanal por parte del municipio (cada siete días le acercan una bolsa con comida) y, sobre todo, de sus amigos, que colaboran para que pueda viajar a Buenos Aires en tren. “Estoy desesperada y ya no sé qué otra puerta tocar, ni qué más hacer”, admitió.

Cualquier persona interesada en brindar colaboración con la causa, se puede comunicar al siguiente teléfono: 2236 78-2330.