Les sacaron los medidores y hace un año están sin calefacción: 185 chicos no tienen presencialidad

Es el drama que atraviesa a la comunidad educativa de la Primaria Nº69, del barrio José Hernández. A pesar de los reiterados pedidos de reparación, todavía no hubo una solución del Consejo Escolar. "Nuestros niños tienen la misma necesidad que los del centro", cuestionaron los directivos.

Foto ilustrativa: archivo 0223.

3 de Julio de 2021 11:08

Por Redacción 0223

PARA 0223

Directivos de la Primaria Nº69 de Mar del Plata exigieron al Consejo Escolar que atienda con urgencia los pedidos con los que se insiste hace un año para reparar la calefacción y poder garantizar una presencialidad educativa en condiciones adecuadas para los alumnos que deben concurrir al establecimiento mientras se transita el invierno y la pandemia del Covid-19.

Carolina Villalba, la directora, dijo que su institución está con los calefactores sin funcionamiento desde junio del 2020 a raíz de una inspección que llevó adelante personal de Camuzzi Gas Pampeana. "Nos clausuraron los calefactores y desde ese momento, hasta la fecha, hice varias solicitudes de reparación al Consejo Escolar, inclusive en época de verano, pero no obtuve una solución", lamentó.

Otro de los problemas que agrava la situación edilicia del establecimiento ubicado en 216 y Zárate está relacionado con las luminarias: según la mujer, solo funciona un tubo fluorescente de los cuatro o cinco que hay en cada salón.  "Por la luz hice siete veces el reclamo en lo que va del año pero todo sigue igual", se quejó.

"Nosotros no estamos con presencialidad completa por la falta de calefactores y luminarias. Es obvio que los nenes no pueden trabajar en condiciones. Así que cuando se volvió a la presencialidad en este último período, hablé y dije que iba a tomar la decisión de no retomar la presencialidad en forma completa", afirmó la responsable de la primaria, en declaraciones a 0223.

En este sentido, Villalba precisó que las clases solamente se dictan dos veces por semana, con una duración de una hora y media. "Se trata de un apoyo pedagógico para los nenes que están con mayores dificultades. Después, los docentes entregan módulos todas las semanas y tienen grupos de whatsapp  para atender las diferentes consultas que surjan", detalló, sobre la modalidad, y ratificó: "Yo sostengo que esta decisión la tenía que tomar porque si no estaríamos siendo los primeros en vulnerar los derechos de los chicos".

La directora dijo que la última respuesta que recibió del Consejo Escolar daba cuenta de que los reclamos por la calefacción y las luminarias seguían en trámite en el área de infraestructura. "Hasta ahora no sabemos cómo está ese trámite. Y nosotros tenemos una matrícula de 185 alumnos en total. Está claro que 'no vende' mostrar que arreglan una escuela chiquita pero también considero que nuestros niños tienen las mismas necesidades que los que van a una escuela del centro", sostuvo.