Marruecos histórico: sacó a España y está en cuartos de final

El equipo europeo era uno de los candidatos y arrancó el Mundial con un 7 a 0 sobre Costa Rica. Jugó mal y no pudo romper a los africanos, sensación del torneo, que fueron efectivos en los penales, tuvieron a Bono como figura y dieron la gran nota de octavos.

Simón para la derecha, la "pinchadita" de Hakimi entrará pidiendo permiso al medio del arco. Marruecos hizo historia.

6 de Diciembre de 2022 14:47

Por Redacción 0223

PARA 0223

En unos octavos de final lógicos, Marruecos terminó con eso y dio la gran nota dejando fuera de carrera a España, uno de los grandes candidatos, y metiéndose por primera vez en su historia entre los ocho mejores de la Copa del Mundo en Qatar 2022. Los africanos hicieron un partido inteligente ante el planteo europeo de tocar la pelota pero sin profundidad, la definición se estiró a los penales y ahí Bono fue enorme al detener dos remates (el restante pegó en el palo) y el lateral de PSG, Achraf Hakimi, liquidó la serie 3 a 0 "pinchando" su ejecución y desatando una fiesta interminable de la selección que ahora espera por Portugal o Suiza.

Ya en el complemento, ambos conjuntos salieron con el mismo planteo que utilizaron en la primera etapa y España prosiguió con su juego de posesión en la búsqueda de romper la defensa marroquí con jugadas a un toque. En una segunda etapa que fue pareja, en la que no hubo un dominador claro del pleito, en el cierre tuvieron cada equipo una ocasión clara de gol: Abdelhamid Sabiri para Marruecos y Nicolás Williams para españa, quien punteó la pelota tras un tiro libre de Dani Olmos que resolvió de gran manera el arquero Yassine Bounou.

En tiempo extra, tanto España como Marruecos no pudieron profundizar sus intenciones de lastimar, carecieron de resto físico y se fueron directo a la tanda de penales. En la definición desde los 12 pasos, el arquero Bounou tuvo una destaca actuación en la definición ya que contuvo los remates de Pablo Sarabia y Sergio Busquets, y le dio el pase de ronda a su equipo junto a la efectividad de sus compañeros que terminó con Hakimi picando la pelota en la última ejecución.

El encuentro tuvo como dominador a España desde el inicio, ya que apostó a su clásico juego de posesión del balón y buscó encontrar los espacios intentar atacar a su rival tanto por las bandas como por el centro del campo de juego. Marruecos planteó una idea de juego en la que le cedió el protagonismo a su adversario y apostó a un equipo compacto que implemento una conducta ordenada para defenderse en su campo y fue lucido para salir de contragolpe, siendo así el más punzante en los primeros minutos con las acciones de Sofiane Boufal, Hakim Ziyech y Achraf Hakimi.

Cada uno con su libreto propuso un trámite cerrado y escaso de ocasiones de gol, pero una desconcentración del conjunto marroquí, le permitió a España quedar cerca de abrir el marcador, pero la acción de Marco Asensio -tras la asistencia de Jordi Alba- no prosperó y golpeó del lado que no suma. En la agonía del primer epílogo, Marruecos puso en alerta a su rival cuando por la banda derecha llegó a fondo y tras un centro pasado, Selim Amallah con un cabezazo envió su tiro apenas desviado.