Piden que reabran los comedores que administraba un pastor detenido y acusado de trata 

A casi dos meses de la detención de la detención del pastor evangelista Roberto Tagliabue acusado de trata de personas, la comunidad religiosa se reunió en las puertas del templo de Lebhenson y Brumana para reclamar por la libertad del líder religioso y así poder reabrir las obras de caridad que se desarrollan en el templo como parte del trabajo de servicio a la comunidad.

“Él da un servicio a la comunidad contención espiritual y brinda un servicio a la comunidad. El tiempo pasa y esperamos que la Justicia comprenda que la tarea pastoral incluye servir a los más necesitados”, aseguraron los líderes religiosos que apoyan al pastor.

Según explicó Teresa Barrios, encargada del comedor y merendero explicó que en el lugar, además de tareas de contención se entregan viandas de almuerzo y merienda a más de 100 personas que no pueden recibir asistencia.

“Las personas tienen hambre. Van a preguntar cuándo se abre el comedor porque tienen hambre y están desesperados”, aseguró Barrios al tiempo que sostuvo que las acusaciones que enfrenta Tagliabue "son infundadas".

El pastor Roberto Tagliabue de 60 años es la cabeza del templo ubicado en Brunana y Lebhenson y responsable de dos espacios linderos en los que vecinos de la zona reciben asistencia alimentaria. En esos espacios, se realizan diferentes tareas como contención y tratamiento a jóvenes con problemas de adicciones, asistencia alimentaria y contención espiritual.
 
Tras el allanamiento que derivó en la detención del religioso acusado de trata, personal municipal clausuró el templo, una despensa y una forrajería que funcionaban en el predio. La investigación comenzó tras un hecho en el que detuvieron a un hombre que amenazó al ahora detenido y su esposa en uno de los locales. En ese momento, el hombre dijo que había amenazado al matrimonio porque no le habían pagado cuando trabajó en los locales que el pastor tenía cerca del templo y del hogar a dónde había parado.