Peñarol no pudo con Boca y le pone todas las fichas a Riachuelo

Durante un tiempo, Peñarol parecía que podía darle pelea a Boca y conseguir el pasaje a los playoffs por mérito propio y sin tener que esperar un resultado ajeno, ni el último choque ante Obras del martes. Sin embargo, en el complemento el local sacó diferencias y le ganó bien por 92 a 82 en el penúltimo partido de la fase regular de la Liga Nacional. Ahora, el "milrayitas" está con la cabeza puesta en La Rioja, donde Riachuelo recibe a Oberá y, si gana, lo mete en playoffs.

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La gira de cierre de fase regular, como era de esperar, iba a ser muy cuesta arriba. La derrota en Comodoro Rivadavia y esta en "La Bombonerita" eran una posibilidad, y mucho más difícil aún será el choque frente a Obras. Por eso, una victoria de Riachuelo le permitiría llegar con la clasificación asegurada a ese juego y con otra tranquilidad. Y eso que en el arranque, pareció que le iba a poder jugar de igual a igual. Un comienzo pobre de ambos lados, con goleo bajo y un buen aporte de Caffaro en la pintura, le dio la ventaja en el primer parcial a Boca por 16 a 14. El segundo cuarto no fue muy diferente, pero el local estuvo más fino en los lanzamientos externos y eso le fueron dando una pequeña luz, sin cortarse, pero manejando el tanteador. Boca llegó al descanso arriba por 5 (38-33), pero con una sensación de que nada estaba definido. 

En el tercer chico eso se terminó. Schattamann se volvió indetenible desde el perímetro, Peñarol no encontraba tiro exterior y dependía mucho de las penetraciones de sus hombres. El "xeneize" se fue escapando, sacó 10 y ya casi no se pudo volver a meter en juego, intentó achicar con el "corazón" de Monacchi, pero Boca respondió con triples y llegó al último cuarto con esa ventaja (68-58). El comienzo de los 10 finales terminó de definir la historia, un parcial de 11-0 (79-58) le puso el broche al partido, no hubo milagro y el triunfo fue 92 a 82 para el dueño de casa.