La autopsia reveló que Tomás Montes murió por una luxación y una hemorragia interna

“Sin particularidades”. El primer dato que surge de la operación de autopsia a los restos de Tomás Montes confirmaron que el joven murió producto de las heridas sufridas al caer desde los acantilados por lo que se dispuso la entrega del cuerpo a la familia.

Las fuentes consultadas por 0223 confirmaron que el estudiante sufrió una gran luxación toráxica y una hemorragia interna. “Si bien no se halló trauma craneal, falleció producto de esa hemorragia”, señalaron.

Tras ser sometido a la autopsia y descartar la participación de terceros en el hecho, la fiscal Andrea Gómez, titular de la Unidad Funcional de Instrucción N°4, dispuso la entrega del cuerpo a la familia para despedir sus restos.

Después de seis días de búsqueda, el cuerpo fue hallado el domingo por la tarde en avanzado estado de descomposición en un sector de rocas en los acantilados del barrio San Patricio de Mar del Plata.

Personal de Defensa Civil, Riesgos Especiales, Policía de la provincia de Buenos Aires y Bomberos realizó mediante un sistema de poleas y sogas las maniobras de rescate vertical desde una altura aproximada de 35 metros, dadas las dificultades para acceder a pie.

El hallazgo del cadáver se produjo casi 72 horas después de que se encontrara la mochila de Montes en la zona de Barranca de los Lobos, muy cerca del acantilado, en la zona sur de Mar del Plata. En su interior estaba su campera azul doblada, libros con anotaciones, un carnet y la libreta de estudiante de la Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Diseño de la Universidad Nacional de Mar del Plata (Unmdp).

Montes, de 26 años, había sido visto por última vez el lunes a la tarde cuando salió de su casa para asistir a una clase en la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales. Salió cerca de las tres y media de la tarde y apenas cinco minutos después fue su última conexión a WhtasApp. Desde entonces nada más se supo de él hasta este domingo.