El frío y el arribo de un turismo más familiar impulsaron la venta de ropa de abrigo

El fin de semana largo por el feriado del 25 de Mayo también dejó un saldo positivo en el sector textil, uno de los rubros más golpeados por la inflación no sólo por los permanentes aumentos de precios, sino también porque es uno de los primeros sobre los que la gente recorta a la hora de cuidar su economía.

Lucas Tejón, referente de la Cámara Textil de Mar del Plata, si bien siempre los fines de semana largos “son un gran impulso para el comercio”, esta vez también se vieron favorecidos por el clima frío. En consecuencia, a diferencia de lo que ocurrió durante Carnaval y Semana Santa, las bajas temperaturas no dejaron más opción a los turistas que ir a recorrer los centros comerciales. 

El comerciante aclaró que en el rubro textil no repercute directamente la llegada de más o menos turistas, como sí sucede en la gastronomía, por ejemplo. No obstante, remarcó que esta vez el saldo fue bueno, hecho que adjudicó al arribo de familias completas en lugar del público joven que se venía advirtiendo en los feriados anteriores. “Nos mejora mucho más la venta porque consumen, en nuestro caso, de una forma distinta”, explicó.

Por otro lado, en cuanto al funcionamiento de la industria textil, Tejón dijo que si bien con los años fue mermando la venta de pulóveres, “Mar del Plata es donde se encuentra el tejido de calidad”. “En algunas zonas de la Argentina se fabrica otro tipo de tejido de punto, mientras que en la ciudad es muy buscado se apunta al diseño y la calidad de las marcas marplatenses de tejido de punto. Fabricamos muchos suéteres de pura lana, de merino y eso levanta el nivel de la industria textil local”, señaló.

Respecto de cómo sobrelleva la industria el contexto inflacionario, Tejón reconoció que deben hacer frente a aumentos de precios de la materia prima “semana a semana” y a pesar de los esfuerzos, deben trasladar esos costos al producto final. El empresario reflejó que hoy un suéter de 100% lana cuesta “arriba de los 25 mil pesos”, aunque hay otros más económicos, de entre 18  y 20 mil pesos pero de otra calidad.