Siete argentinos debutaron en Wimbledon con distinta suerte

En el primer día de acción en Londres, siete argentinos salieron al el césped de Wimbledon y tuvieron distinta suerte. Diego Schwartzman y Nadia Podoroska se metieron en la segunda ronda, Juan Manuel Cerúndolo, Pedro Cachín y Sebastián Báez se despidieron en la rueda inaugural, mientras que Guido Pella y Tomás Etcheverry completarán sus encuentros el martes por falta de luz.

El "Peque" (98° del ranking mundial), de año irregular, pero una mejoría en el pultimo tiempo, debutó con autoridad y superó sin problemas al serbio Miomir Kecmanovic (41°) por un contundente 6-0, 6-3 y 6-4. Ahora, tendrá una prueba de fuego contra el poderoso italiano Jannik Sinner (8°), que despachó al argentino Juan Manuel Cerúndolo por un triple 6-2.

La otra alegría llegó en el cuadro femenino con la rosarina que trabajó para dejar en el camino a la checa Tereza Martincova en tres sets (3-6, 7-6(5) y 6-4). En la segunda rueda, tendrá enfrente a la bielorrusa Victoria Azarenja, dos veces semifinalista en Wimbledon. 

Lo otros dos argentinos que salieron a la pista, tuvieron presentación y despedida. Pedro Cachín no tuvo suerte en el sorteo, ya que le tocó ni más ni menos que el número 1 del mundo, Novak Djokovic. El cordobés peleó con altura, pero nada pudo hacer con el serbio que lo cerró por 6-3, 6-3 y 7-6(4). Sebastián Báez tenía un partido en el que podía avanzar, pero chocó con una muy buena actuación del chileno Tomás Barrios Vera, que se terminó imponiendo por 7-6(7), 3-6, 6-3 y 7-6(2).

Por su parte, Guido Pella y Tomás Etcheverry no pudieron completar sus juegos por falta de luz y volverán para cerrarlos en la jornada del martes. El bahiense le había ganado el primer set a Borna Coric (14) por 6-3 e igualaban 4-4 en el segundo cuando se detuvo. Misma situación vivió el platense,  que estaba dos sets a uno abajo contra el español Bernabé Zapata Miralles. 

El martes también será el turno de Francisco Cerúndolo, la mayor esperanza nacional, y Federico Coria.