El "Dibu" Martínez estuvo en el podio de los más ovacionados y tuvo una noche tranquila

La voz del estadio dio a conocer la formación y la primera explosión fue con él. No sólo porque es el primero que nombran por su ubicación en la cancha, sino que por lo que hizo dentro de la cancha y por carisma, es de los más queridos, es el ídolo de los chicos (y los grandes). Emiliano Martínez sigue cumpliendo su sueño de defender el arco de la Selección Argentina y recibir el cariño de la gente. En los 90', no tuvo mucha acción pero brindó su habitual seguridad. 

Las camisetas verdes y naranjas, con su número y nombre atrás, se vieron sobre todos en los más jóvenes. Como pocas veces, un arquero se metió en el corazón de todos porque se hizo gigante en su puesto. Como siempre, cuando salió a hacer la entrada en calor antes que el resto de sus compañeros, la cancha se vino abajo. Él respondió el cariño con un saludo y empezó con su ritual, para después tener una noche con poco trabajo.