"No maten al vecino por la música": se dispararon las búsquedas de bloqueadores de Bluetooth

Luego de que un policía retirado de la Federal asesinara a un vecino en Lomas del Mirador por el volumen alto de la música durante los festejos de Navidad, estallaron las búsquedas de inhibidores de parlantes en sitios de ventas.

Si bien los bloqueadores de señal están prohibidos en el país debido a que no se permite interferir con comunicaciones legales y tiene riesgos de abuso por parte de los usuarios, muchas personas los ofrecen y venden a través de las redes.

"No maten al vecino por la música", expuso de forma irónica Roni Bandini, el creador de la antena anti reggaeton llamada "Reggaeton Be Gone". Si bien este dispositivo fabricado por el inventor argentino disminuye la calidad del sonido del aparato, existen otras tecnologías que pueden silenciar por completo el parlante.

El funcionamiento es similar al de los inhibidores que se utilizan para robar vehículos: interfieren o generan disrupción en las señales de los sistemas de radiocomunicaciones evitando que se establezcan llamadas, se envíen mensajes o se acceda a Internet o servicios de datos, en este caso, a la música.

"¿Tenés vecinos molestos que ponen música a todo volumen y no te dejan dormir? Con este aparatito adiós a los ruidos", proponen los vendedores a través de sitios como TikTok donde se despliegan todas las funciones del dispositivo. 

En sitios líderes de venta como Mercado Libre, los aparatos se encuentran entre los más buscados durante las últimas horas y muchos relacionan su demanda al trágico episodio ocurrido en Lomas del Mirador.

Cómo funcionan

Los inhibidores pueden ser usados para interferir distintos tipos de comunicaciones o dispositivos, como redes móviles, radares de velocidad, Bluetooth, GPS o infrarrojos.

Se basan en un circuito que cuenta con un oscilador que genera la señal, un generador de ruido, una etapa de ganancia para dar suficiente potencia a la señal y finalmente una o varias antenas que transmiten lo generado por la placa.

Si bien tienen usos legítimos, como proteger a un edificio gubernamental de la señal de un explosivo, su creciente uso para actividades ilegales generó que en muchos países decidan prohibirlos.