Revocaron el arresto domiciliario del ex jefe de sanidad de la cárcel acusado de abuso

La Sala III de la Cámara de Apelación y Garantías revoco el arresto domiciliario que el Juez Saúl Errandonea le había dado al ex jefe de Sanidad del complejo penitenciario de Batán acusado de abusar sexualmente a un par de internos. Juan Carlos Salas seguirá detenido cumpliendo la prisión preventiva mientras avanza la causa a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción N°1.

Los jueces Alfredo Deleonardis y Pablo Poggetto dejaron sin efecto la resolución que dictó en su momento el Juzgado de Garantías N°2 y señalaron que Salas no podrá seguir alojado en una comisaría.

"Consecuentemente, a fin de garantizar los derechos comprometidos, dadas las particularidades del caso, deberá en modo urgente la instancia de origen arbitrar los medios a fin de lograr el alojamiento del encausado en el Servicio Penitenciario provincial en un complejo que posea módulos para alojar internos que han sido o siguen revistiendo la calidad de integrantes de fuerza de seguridad, y que en atención a los delitos que se investigan deberá exceptuarse el Complejo Batán; evaluando a todo evento, incluso la posibilidad de derivación al Servicio Penitenciario Federal", señalaron.

En la resolución a la que tuvo acceso 0223, los magistrados compartieron los argumentos del Ministerio Público Fiscal en torno a que el caso no ingresa en ninguna de las causales contempladas para otorgar la morigeración de la prisión preventiva.

"En efecto, no solo que se carece de constancia médica alguna que certifique el cuadro de salud que presentaría el encausado, sino que las alegadas patologías que poseería por regla, pueden y deben ser adecuadamente abordadas dentro del lugar de encierro", indicaron.

Deleonardis y Poggetto tampoco advirtieron factible una morigeración excepcional al entender que el peligro de fuga o posible entorpecimiento probatorio de la causa pueda evitarse con una medida menos gravosa que el encarcelamiento estricto.

La investigación a cargo de la fiscal María Florencia Salas comenzó en abril tras los dichos de un interno en una audiencia en el Juzgado de Ejecución Penal y una denuncia de la Comisión Provincial de la Memoria. Los dos relatos que marcaban la entrega de drogas o pastillas a cambio de favores sexuales –con un consentimiento claramente viciado por la vulnerabilidad de la víctima- apuntaban al jefe de Sanidad de las Unidades Penales 15, 44 y 50 de Batán.

Para los investigadores, el accionar del jefe de Sanidad, reiterado en el tiempo, marca una sensación de impunidad a partir de la dependencia a las pastillas que el mismo suministraba a las víctimas. “Él se creía con total impunidad, con una naturalización absoluta de su accionar y por eso se avanzó rápidamente ante el temor que alguna de sus víctimas lo pusiera alerta sobre la investigación en curso”, dijeron en su momento las fuentes consultadas por este medio.