Marcha por Melisa: “La cuestión ambiental es muy grave, es una bomba de tiempo”

A cinco meses de la muerte de Melisa Núñez, vecinos de Quequén y Necochea continúan manifestándose por su pedido de justicia en la causa que investiga el fallecimiento de la joven correntina, producido por un derrame tóxico el 13 de abril último.

Este lunes, la marcha pasó por la municipalidad y recorrió las calles céntricas de la capital distrital. Como ocurre cada mes, la mamá de Melisa, Mercedes Fernández, viaja desde la provincia mediterránea para participar de las manifestaciones. “Ahora vino con una prima de ella, en cada evento viene algún familiar a acompañarla, todos los días 13 o subsiguientes jornadas, marchamos. Ella recién está empezando a poder captar algunas cosas dentro de tanto dolor. Viene de otra historia triste porque hace un año y medio perdió otro hijo en un accidente de tránsito”, detalló Mónica Conesa, vecina del partido, en diálogo con 0223.

“Mientras nos veía pasar, la gente aplaudía por la calle. Es una buena señal. Sin embargo, todavía la población no ve los peligros del problema. La cuestión ambiental en Necochea y Quequén es muy grave. La gente todavía no tiene una relación directa con esto. Los empresarios no paran”, graficó Conesa.

En ese sentido, la vecina expresó su preocupación ya que “próximamente se instalarán dos nuevos silos de acopio de fertilizantes en zonas inadecuadas”. “Uno va a tener capacidad para 60 mil toneladas sólidas y otro para 120 toneladas líquidas. La sustancia a guardar se llama `one´, que es explosiva. Los silos se ubicarán en el giro 11 y 12 de Puerto de Quequén, cerca del río y de una usina eléctrica en la que se utiliza petróleo. Esto es una bomba de tiempo”, explicó visiblemente angustiada.

Conesa batalla junto a otros vecinos en difundir la problemática “porque además de la muerte de Melisa, hubo otras 30 personas intoxicadas, 11 de ellas estuvieron graves y tendrán secuelas por muchos años”. En esa línea, confirmó que “varios de los residentes de la zona son querellantes en la causa”.

La investigación de la fiscal Silvia Gabriele recayó en el juez subrogante Aldo Rúa que había cambiado la carátula del caso. Posteriormente, la Cámara de Apelaciones volvió a ratificar que se trata de un homicidio culposo. “Esto es un delito ambiental. No nos olvidemos de que Fernando Cañada es el dueño de la empresa y era el apoderado en 2013 del Partido Fe. Aquí hay muchos vínculos políticos, Venegas tiene un peso muy fuerte y la justicia de Necochea es un bloque difícil de pasar. Hay una fotografía en la que se demuestra que Cañada no sabía lo que estaba haciendo, con una manguera de los bomberos iba metiendo los desechos del producto químico dentro de las cloacas. Él sí utilizaba una máscara antigas. Eso demuestra claramente que lo que estaba echando a las cloacas no era nada bueno. Y que los bomberos no pueden prestar una manguera. Esa imagen marca la impunidad que hay”, detalló Conesa.

En esa línea, la vecina recordó el mal accionar de las áreas estatales una vez acontecido el derrame. “Entre que sucedió la explosión y que Melisa entrara a su casa, pasaron cuatro horas. Nadie la avisó a nadie de nada. No hubo vallado de la zona ni evacuación. En un caso de emergencia, el director de Defensa Civil es el intendente. En los quince días en que el barrio estuvo con tantos problemas, nunca apareció. El desmanejo fue total. Esto pasó un lunes y evacuaron las viviendas recién a la semana siguiente”, recordó.

Por último, Conesa se mostró esperanzada al sostener que “probablemente el caso llegue a juicio, la mamá de Melisa quiere que la causa quede radicada en Necochea” y anticipó que se presentarán junto a un grupo de vecinas en el 30º Encuentro Nacional de Mujeres que se realizará próximamente en Mar del Plata. Necesitamos difundir todo esto”, concluyó.