Con policía, militancia y choferes en la calle, se espera la discusión por el aumento del boleto

Luro e Hipólito Yrigoyen. De un lado, militantes que exigen que el boleto no aumente, porque dicen que tiene que bajar para ser accesible para las clases populares. Del otro, los choferes de la UTA que piden a bombos la suba de la tarifa. En medio, un cordón policial, tupido, intenso, como si los muchachos de Votamos Luchar y el Polo Obrero fuesen una amenaza a la paz social. Y arriba, justo donde está el balcón, el Concejo Deliberante y el inicio de la sesión. Así, este jueves al mediodía, se ve la esquina del Palacio Municipal. 

Desde temprano, sobre calle La Rioja, pudieron verse tres camionetas de la Bonaerense e Infatería. Ya es sabido que ante una posible suba de la tarifa de transporte, habrá quienes movilicen hasta el Municipio y se quejen en la calle y quienes, "en nombre del orden", se paren con bastones y escudos frente a los trabajadores.

El incremento que se discute es el que pidieron los empresarios luego de haber percibido una suba apenas Carlos Arroyo asumió la intendencia. Es decir, lo que este jueves discute el Concejo Deliberante es el segundo aumento en cuatro meses.

Según explicaron los concesionarios, los insumos subieron, las cuentas no dan y precisan una actualización de las tarifas. Para la militancia que se opone al incremento, "es una locura" que el boleto cueste $6.86, "no sólo porque es un monto elevado, sino porque el servicio no es bueno".

Como ocurrió en otras oportunidades, los choferes de la UTA dijeron presente en la calle. Pero no lo hicieron en nombre del "pueblo marplatense", como Votamos Luchar y el Polo Obrero. Los conductores de los colectivos se acercaron hasta el Municipio para exigir a los concejales que aprueben el aumento. Según se excudan, se esa suba depende su incremento salarial.