Las verduras de Mar del Plata cada vez tienen más variedad de agroquímicos

En agosto pasado, la histórica multa que recibió Monsanto en Estados Unidos hizo temblar el mundo de la agrotecnología. Sus nuevos dueños -los accionistas de la compañía farmaceútica alemana Bayer-, anunciaron incluso la eliminación del nombre de la empresa, al tanto de su mala imagen expandida ya por gran parte del mundo. Fueron 250 millones de dólares por daños y 39 millones más de compensación los que tuvo que pagar el gigante a Dewayne Johnson, un jardinero de 43 años afectado por cáncer terminal provocado por el uso de Roundup y RangerPro, dos marcas comerciales que usan glifosato en su composición.

Fue el primer triunfo judicial contra una problemática que se expandió por todos los continentes y hemisferios y que en ciertos lugares del globo terráqueo aún tiene mucho por resolver. El uso de agrotóxicos ha generado en la Argentina y particularmente en el cordón frutihortícola de Mar del Plata numerosos inconvenientes que han ido en alza, con un alcance cada vez más preocupante.

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Una de las organizaciones locales que batalla contra el flagelo es la Asociación Civil Bios, generadora desde hace años de una extensa lista de muestras y estudios para concientizar sobre el tema. En las últimas horas y a partir del análisis realizado por el departamento de Bromatología municipal de General Pueyrredón sobre los residuos de plaguicidas hallados en las verduras de consumo, la entidad divulgó los datos comparativos entre 2017 y 2018 y evidenció, una vez más, estadísticas negativas.

Según indicaron desde Bios, respecto al análisis del año pasado se ha hallado no solo una mayor variedad de agroquímicos en las muestras, también ha ido disminuyendo progresivamente el porcentaje de vegetales con ausencia total de agrotóxicos.

Desde la asociación revisaron la metodología que se aplica para la toma de muestras, básicamente su frecuencia y períodos y observaron un muestreo errático, con variaciones tanto en número de muestras por período como especies estudiadas. Esto refleja un informe un tanto caótico, que varía períodos de análisis (una vez meses, otra vez años) además de cambiar las variables estudiadas.

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Pese a estas dificultades metodológicas para evaluar los resultados y compararlos, se ha podido constatar que entre el informe 2017 y el 2018, se han hallado ahora mayor variedad de agroquímicos (22 y 30 respectivamente), en las muestras positivas. Eso significa que entre 2017 y 2018 aumentó la variedad de sustancias halladas.

Por otro lado, si bien la proporción de muestras aptas para consumo se mantuvo estable, ha ido disminuyendo progresivamente el porcentaje de vegetales con ausencia total de agrotóxicos (lo que no necesariamente los convierte en “inaptos” según este documento).

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Silvana Luján, miembro de Bios, dialogó con Radio 10 al respecto y analizó las alternativas existentes al problema actual: “El modelo agroecológico permite hacer una producción de alimentos seguros sin tener que estar mandando inspecciones ni gastando dinero público para ver cuánto veneno quedó. La gran respuesta son las buenas prácticas agrícolas y estamos hechos un desastre en ese sentido”, sentenció la activista. “La única solución es la reconversión a lo ecológico” agregó. 

Reportes

Desde el inicio del programa a julio de 2018

- Los agrotóxicos hallados en mayor proporción de muestras fueron: Clorpirifos etil, Lambdacialotrina, Bifentrin, Cipermetrina, Azoxistrobin.

- Las especies halladas inaptas más frecuentemente entre noviembre de 2013 y julio de 2018 fueron apio, perejil, lechuga, acelga, cebolla de verdeo, espinaca, repollo, frutilla, limón, arándanos, kiwi, naranja, pelón, pera.

- Desde el inicio del programa a febrero de 2017, se reporta que los agrotóxicos hallados en mayor proporción de muestras fueron: Clorpirifós etil, Lambdacialotrina, Bifentrin, Cipermetrina, Procimidona, Permetrina, Acefato.

- Las especies halladas inaptas más frecuentemente entre noviembre de 2013 y febrero de 2017 fueron apio, perejil, lechuga, acelga, morrón, cebolla de verdeo, naranja, pelón, frutilla, limón, pera, kiwi, arándanos.