Taxistas marplatenses piden llevar la bajada de bandera a 90 pesos en diciembre

Taxistas marplatenses elevaron este miércoles un petitorio al Concejo Deliberante para llevar la bajada de bandera a 90 pesos en el transcurso de diciembre, con vistas a aggiornar el régimen tarifario durante la próxima temporada estival.

La Asociación Marplatense de Propietarios de Automóviles Taxímetros (Ampat) junto a la Federación Nacional de Taxis y otras entidades avanzaron con la solicitud que plantea, en total, un aumento escalonado hasta marzo del 30 por ciento, tal como lo había anticipado días atrás 0223.

El expediente de los choferes de taxis ahora deberá ser tratado por los ediles que integran la Comisión de Transporte del Concejo Deliberante para evaluar la viabilidad el pedido y dar curso o no al ajuste planteado.

El sector busca que se avance primero con un aumento del 20 por ciento que pueda aplicarse desde mediados de este mes, y que llevaría la bajada de bandera a 90 pesos y el valor de la ficha a 9 pesos, el cual se modifica cada 160 metros de recorrido. Actualmente, los costos se ubican desde el año pasado en 75 pesos y 5 pesos, respectivamente.

El 10 por ciento restante, según explicó a este medio Miguel González de la Federación Nacional de Taxis, se aplicaría en marzo y actualizaría la bajada de bandera a 95 pesos. "Estamos planteando un incremento que está por debajo de la inflación que hubo en el país", destacó el dirigente, quien también recordó que se trata de la única actualización que podría materializarse en todo el 2020.

A partir de la ordenanza que impulsó Acción Marplatense y que tuvo sanción en agosto del año pasado, se acordó que todo aumento que se aplique sobre los taxis impacte del mismo modo en los remises, por lo que, de aprobarse este último pedido, también se vería reflejado un ajuste en ese servicio.

El transporte en general y fundamentalmente los taxis y remises han sido uno de los sectores más castigados con el parate general de la actividad que supuso la pandemia del coronavirus. Muchos trabajadores se vieron obligados a reducir sus jornadas laborales o a cambiar de rubro ante el nulo movimiento en la vía pública en las etapas más estrictas de la cuarentena que definió el Gobierno.