La UNMdP, y sus tres años de uso del lenguaje inclusivo: "La experiencia es ampliamente positiva"

Tras la prohibición que se estableció para escuelas de Capital Federal, funcionarios universitarios reivindicaron el uso del lenguaje inclusivo que fue aprobado en 2019. "El lenguaje no se puede regular desde un lugar de prohibición", apuntaron, en diálogo con 0223. 

La Universidad de Mar del Plata también tiene una guía de recomendaciones para el uso de lenguaje inclusivo. Foto: 0223.

11 de Junio de 2022 12:54

Por Redacción 0223

PARA 0223

A contramano de las prohibiciones que estableció el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta en las escuelas de Capital Federal, funcionarios de la Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMdP) revindicaron el uso del lenguaje inclusivo y trazaron un balance “ampliamente positivo” de su implementación en estos tres años.

“A partir de muchas capacitaciones y campañas de sensibilización ofrecidas a todos los cuerpos de la comunidad universitaria, en este tiempo hemos visto que se ha cambiado la mirada de desconocimiento y prejuicio que había sobre este tipo de iniciativas que sabemos que a veces encuentran fuerte resistencia en muchos sectores de la sociedad en general”, destacó Sofía Ardusso, quien representa a la casa de estudios ante la Red Interuniversitaria por la Igualdad de Género y contra las Violencias (Ruge).

En septiembre de 2019, el Consejo Superior de la UNMdP aprobó el proyecto de promoción de lenguaje inclusivo que se confeccionó a través del Programa Integral de Políticas de Género, que depende de la Secretaría de Bienestar. Así, el uso de un lenguaje no sexista e igualitario penetró paulatinamente en todas las comunicaciones de la institución pública: es decir, en las comunicaciones institucionales pero también en la comunicación interpersonal que se da dentro del ámbito universitario.  

“Al principio algunos pensaban que con esto íbamos a obligar a todo el mundo a hablar con la ‘e’ o con la ‘x’ y a escribir de esa forma en las comunicaciones institucionales, pero en realidad lo que justamente plantea la propuesta es que no se puede normativizar el lenguaje, ya que es muy difícil regularlo desde un lugar de prohibición”, razonó Ardusso, ante la consulta de 0223, y agregó: “Lo que plantea esta herramienta es que no se puede discriminar a quien elige utilizar estas alternativas de lenguaje”.

La secretaria de Políticas de Género de la Facultad de Ciencias de la Salud y Trabajo Social recordó que con la promoción de este lenguaje se pretende “evitar la discriminación que puede llegar a suceder por motivos de género cuando, con o sin intencionalidad, hablamos con el masculino genérico de la lengua castellana” y se omite otro “universo de alternativas”. Y en este sentido no solo citó el uso de la “e” o la “x”, sino que mencionó opciones “como hablar del estudiantado en vez de los estudiantes”. “Así se incluyen a todas las personas que se sienten parte de la comunidad y no se incurre en algún tipo de discriminación”, indicó.

Con la experiencia recabada en estos tres años, la funcionaria de la UNMdP consideró que la normativa implementada se convirtió en una “base sólida” ya que “no obliga a nadie a hablar de ninguna forma en particular” pero también da la posibilidad de aplicar el lenguaje inclusivo sin que existan consecuencias o sanciones. “Antes había estudiantes que en sus exámenes elegían utilizar algunas de las alternativas del lenguaje inclusivo pero después nos decían que a la hora de ser corregidos no les tomaban estas alternativas como válidas o que le descontaban puntos por considerarlas como errores gramaticales u ortográficos”, recordó, y sostuvo: “Eso ya cambió y hoy podemos trazar un balance sumamente positivo del trabajo realizado”.

La Universidad, además, cuenta con una guía de recomendaciones para el uso de lenguaje inclusivo, algo que ya se usa en diplomaturas a nivel nacional de Educación Sexual Integral (ESI) como material de estudio. “Hay una base sólida para trabajar aunque por supuesto falta profundizar en la sensibilización. Siempre hay posibilidad de mejorar y esto es algo que solo se puede ver en la práctica porque quizás hay aspectos que no se llegan a tener en cuenta desde la teoría. La idea es estar en constante revisión para resolver cualquier problema que se refleja en la práctica cotidiana”, dijo Ardusso.

Peligro y contradicciones

Al compartir su mirada personal, la representante de la UNMdP ante la Ruge opinó que la decisión de Rodríguez Larreta de prohibir el uso del lenguaje inclusivo en las escuelas de Capital Federal responde a una “medida peligrosa”.  “De esta manera se prohíbe una de las manifestaciones del lenguaje, con el agravante de que esta manifestación busca disminuir las discriminaciones existentes y ampliar el universo de quienes nos tenemos que sentir incluidos en los discursos que se pueden llegar a generar”, criticó.

“No solo es un gran retroceso lo que sucede en Caba sino que evidencia un discurso peligroso donde se pretende regular algo tan difícil de regular como la forma que tenemos de expresarnos las personas. El lenguaje es dinámico y cambiante y debe responder a las necesidades de los distintos contextos históricos y no viceversa”, apuntó, en el mismo sentido.

Ardusso, por otra parte, remarcó que la resolución es “incongruente” con la propia actitud de Rodríguez Larreta, quien en otras oportunidades apeló al uso del lenguaje inclusivo en discursos públicos de gobierno. “Varias veces lo escuchamos referirse a todes o usar la e. Entonces, prohibir o limitar el uso de este lenguaje en el ámbito profesional, laboral o de aprendizaje resulta contradictorio”, reprochó.