Derriban búnker "fortificado" para vender droga a metros de donde hubo un salvaje crimen en diciembre

Un búnker “fortificado” de venta de droga también fue destruido en el barrio Libertad en el marco de los allanamientos simultáneos que realizó la Delegación de Drogas Ilícitas Mar del Plata para terminar con el funcionamiento seis puntos donde se habían detectado maniobras de comercialización de estupefacientes.

La estructura pertenecía a “El Point del Gauchito”, que sobre dos edificaciones ubicadas en la calle Brandsen 9600 y que fue señalada por autoridades policiales como uno de los principales lugares donde se comercializaba droga.

Según detallaron fuentes de la investigación, en ese point había “ “soldaditos o centinelas” que monitoreaban las inmediaciones de manera “permanente” para evitar que cualquier actividad sospechosa pusiera en riesgo la venta de droga.

“Ellos ingresaban a los compradores a través de un paredón con puertas ciegas, hasta un bunker que estaba fortificado en sus aberturas y que se encontraba en el interior lugar. Entonces, través de una pequeña puerta de reja, entregaban la droga sin que nadie los pudiera observar desde afuera”, explicó a 0223 uno de los detectives que participó del megaoperativo de las últimas horas.

La Delegación de Drogas Ilícitas Mar del Plata destacó el apoyo de la Secretaría de Seguridad, Defensa Civil y del Ente Municipal de Vialidad y Alumbrado Público (Emvial), que dispuso maquinaria y personal para poder derribar el búnker que estuvo en la mira de la policía a lo largo de los últimos tres meses.

Un crimen salvaje, a muy pocos metros

Las mismas fuentes revelaron otro dato no menor: el bunker derribado se encontraba a escasos metros del lugar donde se produjo el crimen de Gastón Echeverry, que se gestó en la mañana del 15 de diciembre del año pasado.

Con respecto a ese hecho, los investigadores sostienen que el ataque a puñaladas que terminó con el joven de 33 años sin vida, sobre la calle Necochea entre Venezuela y Fermín Errea, se originó a partir de una discusión que mantuvo pocos minutos antes con Hugo Ramón Espinosa, quien permanece detenido hasta esta fecha.

El asesinato, además, ocurrió en la misma zona en la que Espinosa, en abril de 2014, bajó de su auto, le disparó a dos hermanos que caminaban por la calle y provocó la muerte de uno de ellos y heridas al otro. Por ese hecho fue condenado a diez años y ocho meses de prisión tras la realización de un juicio abreviado y su pena vencía el 9 de septiembre de 2024: sin embargo, la Justicia de Ejecución Penal le habilitó la presencia en un régimen semi abierto.