Entró a robar, quedó enganchado de la ingle en una reja y lo tuvieron que rescatar los bomberos

Persianas, chimeneas, ventiluces y rejas se convierten, a veces, en trampas mortales para los ladrones que quieren usarlas como vías de entrada o de escape en sus atracos. Aunque sobrevivió, por poco ese no fue el destino de un delincuente cordobés que, en su huida, quedó clavado de la ingle en las púas de un portón.

Todo ocurrió este miércoles en horas de la tarde, cuando un hombre, de unos 40 años, ingresó a hurtadillas a una casa ubicada en barrio Providencia de la ciudad de Córdoba y, tras cometer un robo, quiso saltar la reja para escapar, con tal mala suerte que enganchó su entrepierna en la reja. 

Ante la desesperación, pidió ayuda a los gritos y los vecinos llamaron a la Policía y Bomberos, que debieron rescatarlo. "Aparentemente un sujeto de 40 años ingresó al domicilio, sustrajo una mochila y dos maletines. Cuando se estaba ausentando del lugar, tuvo un accidente y quedó incrustado en unas rejas", describió el comisario Roberto Villada en diálogo con Cadena 3. 

Personal del Departamento Unidades de Alto Riesgo (DUAR) debió trabajar intensamente para retirarlo del portón sin empeorar las heridas cortantes ya sufridas por el desafortunado ladrón. Ante la atenta mirada de los policías, también colaboró en el operativo un servicio médico que lo trasladó al Hospital de Urgencias. 

"Ingresa, comete el hecho y cuando se estaba ausentando quedó literalmente sentado e incrustado en las rejas. Se puede observar a simple vista que la reja tiene una terminación en punta y ha quedado allí con la lesión consiguiente", añadió el efectivo policial.

Villada confirmó que el delincuente quedó incrustado en la zona de la ingle. "Aparentemente, esa sería la lesión. Esperemos que no sea de consideración. Lo han llevado detenido al Hospital de Urgencias", finalizó. El hombre quedó imputado por el delito de "robo en grado de tentativa".