Fue Boy Scout, submarinista y es ultramaratonista y hace travesías para mantener viva la memoria de las víctimas del ARA San Juan

El ARA San Juan era su casa, lo conocía de memoria, hubo años que pasó más tiempo dentro del submarino que junto a su familia hasta que llegó su retiro. Pasaron siete años de la tragedia pero Guillermo Tibaldi, no olvida sus días como submarinista y no deja de homenajear a sus compañeros víctimas de la implosión.

Su última hazaña fue caminar 3000 km uniendo los puertos de Mar del Plata y Almanza, en Tierra del Fuego. La elección no fue casual: en Mar del Plata amarraba el submarino y, fue en Almanza por última vez antes de sumergirse en Mar Abierto.

“Puerto Almanza fue el último lugar en el que vieron el submarino y los submarinistas se tomaron fotos y la gente los saludó”, explica ya en Mar del Plata, el Capitán de Navío Retirado a 0223. 

La relación de Tibaldi con el San Juan se remonta a la llegada del buque al país en 1986. Navegó en él durante seis años desempeñándose como Jefe de Propulsión, Jefe de Máquinas, Jefe de Inmersión, Jefe de Operaciones y fue su Comandante durante los años 2002 y 2003. Asimismo se mantuvo vinculado al arma submarina, cuando fue Director de la Escuela de Submarinos y Buceo y destinado en el Comando de la Fuerza de Submarinos por cinco años más. Por eso conocía a varios de los tripulantes que murieron y también a algunas de sus familias.

“El San Juan era mi casa, hay olores, espacios, sonidos que tengo grabados”, dice al tiempo que recuerda que en sus días como submarinista, llegaba al muelle donde amarraba el buque a las 7 de la mañana y abandonaba su puesto a las 18. “Había épocas que estaba más tiempo que en mi casa”, agrega.

Una vida dedicada a homenajear a los submarinistas

Cuando Tibaldi se enteró de la pérdida de contacto con el buque la mañana del 14 de noviembre de 2017, pensó lo peor y no pudo ir a animar a los familiares que hacían guardia en la Base Naval. Esa distancia inicial, se transformó con el paso del tiempo en la necesidad de hacer algo para inmortalizar a las 44 víctimas de la tragedia. Así, en 2019, realizó la primer expedición homenaje en la que en 83 días unió Mar del Plata con el Aconcagua con el objetivo de construir un memorial.

Caminó 1600 km hasta la base de la montaña y 6962 metros de desnivel hasta llegar al pico máximo. Desde entonces en cada una de sus expediciones suma una parte educativa y da charlas en escuelas y espacios donde lo requieren para contar la historia del submarino y mantener viva la memoria de los 44 tripulantes.

Para esta travesía además tuvo una misión solidaria: donar pañales para el Hospital Regional Ushuaia. La idea inicial era entregar 9 mil unidades, pero recolectó en su recorrido un total de 10.500.

La travesía más desafiante de su carrera

La última travesía inició el 6 de julio en la base naval de Mar del Plata. “Sabía que iban a ser 163 días. Calculé que iba a caminar 30 o 35 kms por día”, dice. Para esta travesía, Tibaldi contó con un vehículo de apoyo para comer y dormir que lo acompañó en todo el recorrido y también contó con el apoyo de su familia. “Tuve un gran acompañamiento de la sociedad en cada pueblo por el que pasé”, dice el hombre que atravesó la Patagonia en su época más dura y se enfrentó a lo largo de su recorrido a temperaturas bajo cero, nevadas, viento y tormentas y se preparó como si fuese a correr un ultramaratón.

El entrenamiento, si bien fue exigente no es algo que le haya costado. Es que Guillermo Tibaldi es Kayakista, ultramaratonista, triatleta, buzo deportivo y personal trainer. A los 100km semanales, le sumó un trabajo de fortalecimiento. "A mi edad, lo más importante para no perder la capacidad física es el trabajo de fuerza, lo que antes se llamaba ‘complemento de pesas’”, agrega.

Consultado sobre cómo decidió dedicarse al submarinismo, Tibaldi asegura que siempre le gustó el mar y se sintió atraído por la aventura. “Fui Boy scout de chico, pero siempre me gustó el mar. Empecé a dedicarme al deporte, pero la Armada me ofrecía la posibilidad de combinar las dos cosas”, explica.

Por último, el Capitán de Navío (RE) explica que, por el momento, tiene pensado disfrutar de su familia y no descarta emprender una nueva aventura . “Pienso que voy a seguir haciendo actividades”, revela el hombre que se convirtió en un referente de la causa ARA San Juan