Dolor de cabeza para Alvarado: dos bajas importantes para lo que viene

El empate ante Tristán Suárez 2 a 2, después de ir ganando en dos oportunidades, no le salió tan caro a Alvarado como las bajas que sufrió por lesión. En el lapso de cinco minutos, Mauricio Giganti debió gastar dos ventanas de cambios por lesión en la rodilla izquierda de Tomás Rambert y Guillermo Sánchez. Después de los estudios correspondientes, y cuando se temía algo peor para el exArgentino de Monte Maiz, el club informó que ambos tienen esguince de rodilla y tendrán de 4 a 6 semanas de recuperación.

Obviamente, cuando los hinchas de Alvarado sacan las cuentas, lo primero que piensan es el clásico con Aldosivi del fin de semana del 24 de marzo en el José María Minella. Y los números no les dan, porque el mínimo de cuatro semans recién los pondría nuevamente en una cancha los primeros días de abril.

Fueron 3' fatales para el "torito". A los 16', Tomás Rambert quedó tirado sobre la línea, en el medio de la cancha, lo entraron a atender y rápidamente pidieron el cambio y lo retiraron sin pisar. Enseguida, Guillermo Sánchez hizo una gran maniobra y Guerrero lo cerró cuando iba a definir, le pegó un patadón que el árbitro no sancionó con penal como correspondía y, encima, en el piso no se movió del dolor. El gesto al banco fue automático: cambio.

Dentro de la mala noticia, lo importante es que en principio se especulaba con una gravedad mayor para el exArgentino de Monte Maiz, pero la resonancia corroboró que se trata de un esguince y no una rotura que lo podría haber marginado del resto de la temporada.

Ahora, Giganti trabajará pensando en el choque con Patronato del domingo a las 18 en el Minella sin dos de sus principales piezas de ataque. Santiago González, Mariano Barbieri y Emiliano Bogado (no fue a Ezeiza por un golpe) son las variantes naturales para esa posición.