Pedirán trasladar a la Unidad Penal N°44 al jefe de sanidad acusado de abusar a dos internos

La defensa de Juan Carlos Salas lo planteó por su estado de salud y la necesidad de administrar medicamentos. La semana próxima ofrecerán varios testigos.

Salas fue detenido la semana pasada. (Foto: 0223)

31 de Mayo de 2024 14:08

Por Redacción 0223

PARA 0223

A una semana de su detención y traslado a la Estación de Policía Comunal de Balcarce, la defensa del ex jefe de Sanidad del complejo penitenciario de Batán acusado de dos abusos pedirá este viernes su traslado por cuestiones médicas a la Unidad Penal N°44 de Batán.

El abogado Matías Castro le confirmó a 0223 que le pedirá a la Justicia de Garantías el traslado para facilitar su atención médica que es complicada de llevar adelante en su lugar actual de alojamiento. “Tiene diabetes entre otras condiciones médicas que obligan a un control y entrega de medicamentos que no tiene ahora”, señaló.

El profesional sostuvo que a la espera de la evacuación de citas que realiza la Unidad Funcional de Instrucción N°1, la semana próxima ofrecerán nuevos testigos, pero que no solicitarán la excarcelación en virtud de la calificación propuesta por la fiscal. “Nos interesa saber las motivaciones que tuvieron los denunciantes para involucrarlo”, agregó.

Castro confirmó que se ha solicitado la realización de una pericia psicológica y que la misma se llevará adelante el 27 de junio. A su entender, cuando avance la instrucción estarán en condiciones de solicitar alguna morigeración como el arresto domiciliario.

Salas era el Jefe de Sanidad.

La investigación hace un mes y medio tras los dichos de un interno en una audiencia en el Juzgado de Ejecución Penal y una denuncia de la Comisión Provincial de la Memoria. Los dos relatos que marcaban la entrega de drogas o pastillas a cambio de favores sexuales –con un consentimiento claramente viciado por la vulnerabilidad de la víctima- apuntaban al jefe de Sanidad de las Unidades Penales 15, 44 y 50 de Batán.

Para los investigadores, el accionar del jefe de Sanidad, reiterado en el tiempo, marca una sensación de impunidad a partir de la dependencia a las pastillas que el mismo suministraba a las víctimas. “Él se creía con total impunidad, con una naturalización absoluta de su accionar y por eso se avanzó rápidamente ante el temor que alguna de sus víctimas lo pusiera alerta sobre la investigación en curso”, dijeron las fuentes consultadas por este medio.