Alvarado quiere aprovechar el envión

En tres semanas cambió todo para Alvarado. Desde aquella derrota ante Tristán Suárez y la salida de Mauricio Giganti, llegó Gabriel Gómez y movió las piezas, acomodó el equipo, cambió el sistema, los jugadores cambiaron el chip y el "torito" consiguió tres victorias seguidas, la última ante Aldosivi en un clásico que quedará para la historia después de 27 años. A las 15, el conjunto marplatense buscará seguir por ese camino y mantenerse en zona de Reducido ante Güemes de Santiago del Estero, por la 28° fecha de la Zona A de la Primera Nacional. 

El ánimo en el fútbol es todo. Gómez agarró con un equipo hundido desde lo emocional y lo futbolístico y se trajo tres puntos de Paraná, después de casi un año sin ganar como visitante. Ahí hizo el click, goleó a Racing de Córdoba y llegó en su mejor momento al clásico con Aldosivi. En un Minella con más de 20 mil personas, el golazo de Diego Becker le dio la victoria, la tercera alegría seguida y lo metió en zona de Reducido.

En lo futbolístico, el entrenador y los jugadores festejaron como merecían la victoria clásica, pero después empezaron a trabajar pensando en este partido, porque es igual de importante en sus intenciones de clasificar. Por eso, Gómez hizo hincapié en que lo que pasó ya pasó y había que afrontar de la mejor manera este choque ante el colista. Para viajar al norte del país vía terrestre hasta Buenos Aires y en avión hacia Santiago, sólo hay un cambio respecto a los 20 que salieron frente a Aldosivi, con el ingreso en la lista de Lucas Rebecchi por Marco Miori. 

Enfrente habrá un equipo peligroso porque está obligado a ganar de local para tratar de salir del fondo de la tabla. Sin triunfos de visitante lo que pueda hacer en su casa es lo único que lo mantiene con la ilusión de salvar la categoría. Otro punto a tener en cuenta es el árbitro Carlos Córdoba, a quien Alvarado ya padeció en su visita a San Martín de Tucumán.