El acusado de matar con un destornillador a un hombre se negó a declarar y seguirá detenido

El acusado de matar a un hombre con un destornillador en el centro de la ciudad hace casi tres semanas que fue detenido el sábado a la tarde en el barrio Estrada se negó a declarar en Tribunales y seguirá alojado en el complejo penitenciario de Batán mientras avanza la investigación a cargo de la fiscal Constanza Mandagarán.

Fuentes judiciales confirmaron a 0223 que Lucas Ramos se entrevistó con miembros de la defensa oficial y no quiso dar su versión de los hechos ante la titular de la Unidad Funcional de Instrucción N°4. Para la funcionaria, el sujeto de 31 años es el autor del ataque que mató a Esteban Bellini (27).

Tal como adelantó el sábado 0223, fue personal del Gabinete de Homicidios de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) el que detuvo al imputado en la calle Montes Carballo entre Aguirre y Estrada en cumplimiento de la orden de detención dada oportunamente por la Jueza de Garantías Lucrecia Bustos.

El personal secuestró la moto en la que se desplazaba y un celular que será peritado los próximos días. Quizás a la espera de la incorporación de esa información y de designar formalmente a su abogado particular, Ramos prefirió guardar silencio por el momento.

Ramos fue interceptado por personal policial que simulaba ser vendedores ambulantes porque habían obtenido el dato que en las últimas horas se desplazaba por la zona donde trabajaba su novia. Desde el crimen de Bellini, no había regresado a la casa que ocupó en Santa Cruz y Bordabehere y que fue oportunamente allanado.

En ese operativo no encontraron al imputado, pero aprehendieron a su amigo de 29 años, secuestraron varias prendas de vestir del imputado y su pareja, tres juegos de llaves con manchas símil hemáticas y un celular. 

Ese amigo quedó alojado en la Unida Penal N°44 de Batán imputado del delito de Encubrimiento agravado en razón del delito precedente. En su única presentación en Tribunales dio una versión exculpatoria dijo que no vio el ataque contra Bellini y que tenía las prendas de su amigo porque se lo había pedido.

Fueron testigos ocasionales del hecho quienes lo vieron tirado en el piso en Rivadavia y Santa Fe, en pleno centro, y dieron aviso al 911. Personal policial convocó al Same, que lo trasladó de urgencia a la guardia del Higa dónde lo intubaron y recibió la primera atención.

Bellini estuvo internado en coma inducido en el Hospital Interzonal General de Agudos (Higa) y su estado era muy grave a partir de la herida cortante que recibió en la cabeza. Finalmente, los médicos no pudieron salvarle la vida y falleció el martes 4 de marzo, minutos antes de las diez de la noche.