"Si ser gay o tener VIH es un problema físico, soy culpable"

Así respondió Diana Fanesi los dichos del titular de Unidad Sanitaria de Frontera, quien había relativizado la paliza que le dio a la enfermera un compañero de trabajo.

Diana Fanesi ya cuenta con el asesoramiento de un abogado.

22 de Agosto de 2014 19:10

Por Redacción 0223

PARA 0223

Lejos de aclarar la situación, las explicaciones que dio el titular de la Unidad Sanitaria de Frontera respecto de la brutal golpiza que recibió en ese lugar una enfermera dejaron entrever lo que Diana Fanesi, la mujer atacada, había anticipado: sus propios compañeros de trabajo creían que ella había provocado al golpeador.

Nazareno Di Giovanni habló de una “pelea” en la que las dos partes habían resultado “con golpes”. Incluso, llegó aún más lejos: dijo que Fanesi tiene “problemas físicos y psicológicos” y reconoció que por esas causas ya había pedido su traslado en reiteradas oportunidades. Como si eso sirviera para justificar que un hombre le haya –ni más ni menos- desfigurado la cara a trompadas a una compañera de trabajo.

Ante las acusaciones, Diana respondió. “Si ser gay y ser portadora de VIH desde hace 28 años es un problema físico, entonces sí, tiene razón; no tengo nada que esconder”, afirmó este viernes a 0223.

Y siguió: “¿Problemas psíquicos? Sí, tengo un montón; estoy tan loca que durante siete años me paré frente a la catedral para enseñarle a los pibes cómo se usa un preservativo para que no se contagiaran VIH, y trabajé en prevención en una murga de la que participaba”.

Aunque a ella no le sorprende en absoluto, el responsable de la unidad sanitaria aún no se comunicó Fanesi. En cambio, durante las últimas horas recibió en su propia casa la visita de Andrea Caro, la titular del área a nivel nacional, que viajó desde Capital Federal para ver cómo se encontraba. “Vino con un abogado asesor que me va a ayudar con las denuncias que ya hice en la Justicia”, contó.

En ese contexto, Diana lamentó la actitud de Di Giovanni aunque admitió que es habitual en este tipo de casos, en los que “la víctima termina siendo la culpable de todo”.