Los hermanos "Pepo" y "Pirulo" Amarilla, a juicio por un crimen en el barrio San Martín

La causa en la que se investiga la participación -con distinto grado de responsabilidad- de dos hermanos en el crimen de un joven de 27 años cometido el año pasado, fue elevada a juicio tras el pedido formulado por la fiscal Andrea Gómez. El imputado como autor material del hecho es Roberto “Pepo” Amarilla, quien fue detenido dos semanas después del crimen cuando regresó al lugar de los hechos.

El homicidio de Claudio Granadino quedó relegado en la consideración general porque ocurrió el mismo día -16 de diciembre de 2014- que el triple crimen de Monte Terrabusi. Más allá de que compartía un lazo familiar con una de las otras tres víctimas, los investigadores descartaron con el avance de las causas una relación entre los dos episodios.

Para la fiscal Andrea Gómez hay elementos suficientes para establecer que esa madrugada Roberto Amarilla le asestó –luego de una discusión- una puñalada a Granadino en la zona de la arteria ilíaca femoral izquierda. Minutos después y más allá que fue trasladado de urgencia a una sala de atención de la salud, murió desangrado. Según el pedido fiscal al que tuvo acceso 0223, “Pepo” contó con la colaboración de su hermano Adrián “Pirulo” Amarilla quien “agarró a la víctima por detrás para facilitar su accionar”.

Algunas de las testimoniales recogidas durante la instrucción penal preparatoria confirmaron que el crimen se dio en el marco de una discusión –relacionada con la venta de droga- entre Granadino y Amarilla. Luego de que la víctima fuera herida en la esquina de Mateotti y Benito Lynch, algunos de sus allegados se acercaron a la vivienda de los hermanos y se produjeron incidentes que terminaron cuando se efectuaron varios disparos que no dejaron heridos.

El avance de la investigación le permitió a la fiscal Gómez solicitar un total de trece allanamientos durante los primeros días. En el realizado en la casa de los Amarilla secuestraron un revólver calibre .22, por lo que “Pirulo también está imputado del delito de tenencia ilegal de arma de fuego de uso civil. Aunque “Pepo” permaneció prófugo dos semanas, quedó detenido cuando regresó al barrio para ver a su familia.

Luego de que la Justicia de Garantías avalara la solicitud de elevación a juicio solicitada por la fiscalía 4 tanto para el homicidio como para la tenencia de arma, solo resta definir la fecha del debate.