Con “ñoquis a la Silvana en salsa Rojas”, trabajadores denuncian listas negras

“Como todo sigue igual, e incluso peor, decidimos en asamblea realizar una ñoqueada y todo salió mejor de lo que esperábamos”. La palabra de Carolina, una de las integrantes del grupo de Trabajadores de Cultura Autoconvocados en Defensa de la Cultura Pública, es la voz de muchos otros exempleados que este año se han quedado sin trabajo en la Secretaría municipal que entiende en el área.

Con el arribo del día 29, la costumbre de comer ñoquis llegó hasta la puerta del municipio. “Le calculamos un número de viandas y se nos agotaron. Desde las 11 hasta las 13, hubo gente permanente. Muchas personas en situación de calle, incluso algunos solos que luego traían a su familia. Después se acercaron los micro emprendedores que hay en la zona, generalmente con niños chicos”, describió la joven, para dar cuenta además de la compleja situación social que se vive en Mar del Plata.

La novedad de la actividad resultó que, a la denuncia del vaciamiento implementado en el sector por la titular Silvana Rojas desde hace varios meses, los manifestantes le sumaron otra preocupación: la elaboración por parte de la autoridades comunales de una nómina en contra de los protagonistas de los reclamos.

“Se estableció una lista para que aquellos que se manifiestan en desacuerdo, no participen en otras contrataciones de la Secretaría”, explicó Carolina.

“Lo único que cambió, fue el 50% que se pagó a la Comedia Municipal, que tampoco se efectuó de acuerdo a lo que se había prometido, que era un pago por semana: pagaron la primera, a las tres semanas la segunda, luego pasaron otras semanas y pagaron la tercer cuota. Los segundos tres meses recién entraron ahora en reconocimiento de deuda al Concejo Deliberante”, precisó la trabajadora cultural.

Consultada por la realidad en los barrios que quedaron acéfalos de los talleres y actividades en el rubro, Carolina se sinceró: “En este último Día del Niño, jornada en la que habitualmente se realizaban muchas actividades en diferentes barrios con las divisiones del área de Escenarios Andantes, con obras de teatro y circo, nos pasó que muchas sociedades de fomento nos llamaron para saber si íbamos a poder hacer algo. Fue una clara representación del vaciamiento existente”, concluyó.