La odisea del vuelo que venía a Mar del Plata y por una tormenta terminó en Montevideo

Fernando Daumas vive para contarlo. Lo que podría haber terminado en una tragedia, según le contó a 0223, finalmente puede relatarlo gracias a la pericia del piloto. Días después de sufrir un “espantoso momento” a bordo de un avión de Aerolíneas Argentinas, se contactó con este medio con el objetivo de que “la gente se entere que en casos de tormenta fuerte no deben salir más aviones”.

La espeluznante historia que vivieron decenas de pasajeros de la empresa de aviación estatal arrancó el sábado 16 de diciembre último. En Aeroparque, el vuelo nº1618 tenía programado partir sobre la hora 21.40 con destino a Mar del Plata. En el exterior de la estación aérea, el clima era absolutamente adverso. El alerta anunciado por el Servicio Meteorológico Nacional se desarrollaba en plenitud en toda la región, con alcance en buena parte de la provincia de Buenos Aires, incluido el tramo hacia la costa atlántica.

“Por negligencia de Aerolíneas se tomó la decisión de salir. El avión se movía bastante, más de lo normal. A los 20 minutos, el piloto decide volver a Aeroparque pero ya era tarde. Nos encontrábamos en el ojo de la tormenta, lo que produjo que el avión fuera a la deriva durante 2 minutos perdiendo altura”, detalló Fernando sobre el angustioso momento.

El drama no terminó ahí y fue de tal envergadura, que resultaron más los protagonistas del viaje que le hicieron llegar a 0223 su mención por lo sucedido. Entre los pasajeros, se hallaba por ejemplo el presidente del Colegio de Martilleros y Corredores Públicos de Mar del Plata, Miguel Ángel Donsini.

“Los sacudones ya eran demasiado fuertes y hubo dos casos de personas que golpearon contra el techo y cayeron. Una verdadera tragedia, el comisario de a bordo se fracturó en tres pedazos el húmero y mi mujer voló con la bebé en brazos hasta el valijero, está toda golpeada”, agregó Daumas, sobre la triste odisea aérea.

“Luego de toda esa secuencia, el piloto quiso llevar la nave a distintos aeropuertos, como el de Córdoba o el de Rosario, pero estos también estaban cerrados por el temporal. Terminamos en Montevideo, sin poder salir del avión por 40 minutos de lo que se movía en tierra”, graficó el hombre, recordando el final de la travesía.