Profundo dolor por la muerte de Miriam Rosana Vergara

En 2008, la mujer recibió un trasplante renal que le cambió la vida tras varios años de luchar con una dura enfermedad. Desde entonces, se transformó en una colaboradora "infatigable" de la procuración de órganos.

20 de Agosto de 2020 15:05

Por Redacción 0223

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Desde el Centro Único Coordinador de Ablación e Implante de la Provincia de Buenos Aires (Cucaiba) despidieron con profundo dolor a Miriam Rosana Vergara después de que se conociera su fallecimiento este miércoles por la noche.

La mujer de 53 años que residía en Mar del Plata se había transformado en una colaboradora "infatigable" de la procuración de órganos después de haber recibido a principios de 2008 un trasplante renal que le cambió la vida.

"El personal de Cucaiba y especialmente las trabajadoras de la sede de Mar del Plata participamos con pesar del fallecimiento de Miriam Rosa Vergara. La despiden con profundo dolor y acompañan a sus familiares en este triste momento. Llevaremos siempre en nuestros corazones el recuerdo de tantos momentos compartidos, trabajando con amor y generosidad", expresaron desde el organismo, en un comunicado.

Miriam Vergara era oriunda de Morón pero desde 1980 que residía en Mar del Plata junto a su marido y sus 2 hijos. En 1987, después de varios estudios clínicos, le detectaron Lupus, una enfermedad crónica autoinmune que puede dañar cualquier parte del cuerpo, entre ellos órganos como el riñón.

Luchó durante doce años con la enfermedad hasta que tuvo la necesidad de ingresar a diálisis, a la espera de recibir un trasplante renal. “Los 10 años en diálisis fueron tremendos. El último tiempo ya no quería saber nada de estar atada a una máquina, me deterioré mucho física y mentalmente. Sufría ataques de pánico, en un momento estaba conectada de los dos brazos y eso me tuvo muy angustiada. Pero siempre hay motivos para luchar”, aseguraba.

En la mañana del 16 de marzo del 2008, llegó el llamado del equipo de trasplante del Hospital San Martín de La Plata, a cargo Hugo Petrone, quien tuvo que convencer a Miriam de viajar desde Mar del Plata para trasplantarse. “No creía que me estaban llamando a mí. No quería saber nada, me puse muy mal porque ya había tenido un operativo fallido y no quería pasar por eso nuevamente, pero gracias a mucha gente que me dio fuerza y ánimo  me trasladaron", recordaba Miriam.

La mujer aseguraba que el trasplante le "cambió la vida por completo" y desde entonces alentó a la sociedad e insistió en la importancia de concientizar sobre la importancia de donar órganos, un acto de amor solidario que puede salvar y cambiar las vidas de muchas personas.

 

 

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