Clausuran "La Bombonera" para investigar si hubo más gente de la permitida

Poco se habló en la segunda fecha con público de aquellas que habían podido superar el aforo permitido. Fue tan evidente como en varias canchas hubo más hinchas de los habilitados en la jornada anterior y no se realizaron sanciones fuertes, más allá de las muestras de preocupación de las autoridades nacionales, que casi ni se volvió a tocar el tema, además de que no se vieron situaciones como las de la cancha de River en el Superclásico o de Colón festejando el título de la Copa de la Liga Profesional. Sin embargo, sorprendió la decisión judicial de allanar y clausurar preventivamente "La Bombonera" para investigar irregularidades. 

El cuerpo de investigaciones judiciales del Ministerio Público Fiscal allanó y posteriormente clausuró por cinco días el estadio de Boca Juniors, la Bombonera, ante las sospechas de que se superó el aforo del 50% permitido por protocolo sanitario para el partido del sábado pasado ante Lanús, por la 15ta. fecha del campeonato de la Liga Profesional de Fútbol.

El allanamiento se realizó a pedido de la fiscal Celsa Rodríguez, tras la investigación iniciada ayer, no solo por la eventual violación del protocolo sanitario sino también por la venta de entradas apócrifas, y acto seguido se decidió una clausura preventiva de carácter administrativo hasta el próximo sábado inclusive, con el objetivo de seguir revisando especialmente las cámaras de seguridad y los molinetes del estadio "xeneize".

"La idea del allanamiento es la de secuestrar las imágenes de las cámaras de seguridad y todos los elementos que permitan determinar la cantidad de gente que entró a la Bombonera para el partido con Lanús", informaron fuentes judiciales a Télam. Según fuentes boquenses consultadas por Télam el club no superó "el 46 por ciento del aforo".

Estas investigaciones se suman a las iniciadas en River Plate y Vélez Sarsfield el fin de semana pasado por haber superado la capacidad del 50% permitida en sus estadios, en el superclásico con Boca y ante Independiente respectivamente, con motivo de la vuelta de los hinchas desde el 1 de octubre y tras la restricción impuesta en marzo de 2020 por la pandemia de coronavirus.

La justicia porteña allanó ambos clubes para determinar en qué grado incumplieron con la limitación impuesta por decreto presidencial, a la vez que imputó a sus presidentes, Rodolfo D'Onofrio y Sergio Rapisarda, y a todas sus comisiones directivas. A diferencia de esta oportunidad, en aquella no clausuraron los estadios.