Falleció Carlos Timoteo Griguol, emblema del fútbol argentino

El exjugador y entrenador de 86 años, se encontraba internado hacía 20 días por una afección pulmonar producto del coronavirus. Leyenda de Rosario Central, Ferro Carril Oeste y Gimnasia y Esgrima La Plata. 

El fútbol argentino llora la muerte de uno de sus tipos más queridos.

6 de Mayo de 2021 08:46

Por Redacción 0223

PARA 0223

El Covid-19 se sigue cobrando muertes en nuestro país. Y este jueves, una infección pulmonar derivada del virus que tiene en vilo al planeta, terminó con la vida de Carlos Timoteo Griguol, un maestro del fútbol, exfutbolista y director técnico que dejó una huella en todo el fútbol argentino, pero con un lugar enorme en el corazón de Rosario Central, Ferro y Gimnasia de La Plata. Tenía 86 años y se encontraba internado en el Sanatorio de Los Arcos en Capital Federal. 

El cordobés había sufrido un deterioro en su salud por una neumonía derivada del contagio de coronavirus, lo que llevó a fiebre y dificultades respiratorias que obligaron internarlo el 16 de abril donde permaneció hasta este triste desenlace. Días atrás, el 26 de abril, se había dado a conocer la noticia de su muerte en los medios nacionales, pero su familia salió a desmentir que eso haya sucedido. Finalmente, esta vez fue su propio yerno, el exfutbolista Víctor Hugo Marchesini, el que confirmó el fallecimiento.

Como futbolista, jugó 392 entre 1956 y 1969 entre Atlanta y Rosario Central, las únicas dos camisetas que vistió. Además, fue convocado a la Selección Argentina y formó parte del plantel que conquistó el título Sudamericano de 1959. En 1966 llegó al "canalla" y tres años más tarde se retiró y se puso a trabajar en las inferiores del club, hasta que a principios de la década del '70, tuvo su chance en Primera División, llevando al equipo rosarino a lo más alto con la obtención del Campeonato Nacional 1973. Jugó copas internacionales, llegó a semifinal de la Libertadores '74 y luego de un paso por el fútbol mexicano con Tecos de Guadalajara, regresó a Central. También tuvo un paso por Kimberley de Mar del Plata en el primer semestre de 1979.

Después llegó a su vida Ferro Carril Oeste y ahí marcó un antes y un después del club de Caballito, al que le dio los únicos dos títulos de su historia en el profesionalismo: Nacional 1982 y 1984. Los equipos de Timoteo daban gusto de ver jugar y el entrenador dejó una huella en aquellos futbolistas que dirigió y que siguieron sus pasos. Luego del "Verde", hubo un paso corto por River, donde logró la Copa Interamericana, pero apenas permaneció durante un año. 

En 1994 se calzó el buzo de Gimnasia y Esgrima La Plata, donde estuvo a muy poco de conseguir el título que se le negó a lo largo de su historia. Fue tres veces subcampeón (Clausura 95 y 96 y Apertura 98), pero hizo escuela, dejó una marca muy importante y se ganó el cariño y el respeto de todo el fútbol argentino. 

También dirigió en Unión de Santa Fe y Betis de España, y se retiró de la conducción técnica en el "Lobo" en 2004.