Un detenido por el crimen de la madre del concejal de La Costa

Un hombre de 39 años que se hospedada en uno de los dúplex que alquilaba la víctima, aparece en videos ingresando y egresando varias veces del lugar del crimen.

Beatriz Irma Zaramatti vivía sola en un dúplex en Mar de Ajó y alquilaba otros inmuebles cercanos.

29 de Marzo de 2023 15:30

Por Redacción 0223

PARA 0223

Un hombre fue detenido en las últimas horas como sospechoso de haber participado del crimen de Beatriz Irma Zaramatti, la madre de un concejal del partido de La Costa que fue asesinada de un golpe con una plancha bifera en la cocina de su casa de la localidad de Mar de Ajó.

Así lo detalló la agencia de noticias Télam a partir de la detención e identificación del detenido, un hombre de 39 años que lleva por nombre Luis Alberto Almeida, de profesión albañil.

El sujeto era inquilino en una de las unidades que la víctima alquilaba en el complejo de dúplex donde ella vivía y en donde fue asesinada el domingo pasado.

Primeras pruebas contra el detenido

Una serie de videos de cámaras de seguridad donde se lo ve entrar y salir del sitio del crimen y un par de zapatillas y una sábana con aparentes manchas de sangre, son los elementos por los que el fiscal de la causa, Martín Prieto, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 2 de La Costa, pidió su detención en el marco de esta causa por “homicidio”.

La detención fue concretada por detectives de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Dolores y de la Sub DDI de la Costa, en un domicilio alternativo del sospechoso ubicado en la calle Lebensohn al 300 de Mar de Ajó, a unas diez cuadras del sitio donde fue asesinada Zaramatti.

“Es un hombre con problemas económicos. Los allanamientos donde nos llevamos un par de zapatillas y unas sábanas con aparentes manchas hemáticos fueron clave”, dijo a Télam un jefe policial que participa de la investigación.

La misma fuente reveló que de la observación de cámaras de la zona se pudo establecer que en el horario del crimen el sospechoso Almeida ingresa y egresa en reiteradas oportunidades del lugar.

El hallazgo de la mujer sin vida

El cadáver de Zaramatti (78), profesora de educación física jubilada, fue hallado el lunes a las 17.30 por su propio hijo, Sergio Omar Santana (53), concejal por el PRO y vicepresidente primero del Concejo Deliberante del partido de La Costa.

La mujer vivía sola en uno de los dúplex ubicados en Blanco Encalada 1047, en Mar de Ajó, y era propietaria de otras unidades del mismo complejo, que alquilaba a otros vecinos.

El edil, quien reside en la localidad vecina de Paraje Pavón, había estado de vacaciones en Entre Ríos hasta el viernes último, y fue a la casa de la madre el lunes porque ella no le contestaba los mensajes, según declaró.

La mujer fue hallada tendida en el piso de la cocina y se presume que estaba preparando la cena cuando fue atacada, ya que una de las hornallas estaba encendida, y sobre la cocina, a un costado, había una olla con agua.

Según la autopsia, la mujer murió producto de un traumatismo de cráneo que es compatible a haber sido provocado de un golpe de la plancha churrasquera de hierro con mango de madera circular de 28 centímetros de diámetro incautada en el lugar de los hechos por personal de Policía Científica. El golpe fue sobre el parietal derecho, unos dos centímetros por encima de la oreja.

Zaramatti, de 78 años, era profesora de educación física jubilada.

El posible momento del crimen

Según la primera estimación forense de la data de muerte, Zaramatti fue asesinada entre las 20 y las 23 del domingo último.

Vecinos del complejo en el que residía declararon por su parte en la causa que la habían visto por última vez cerca de las 18 del domingo, y uno de ellos precisó que escuchó su voz alrededor de las 21.30 de ese día.

Una fuente judicial explicó que la hipótesis es la de un homicidio vinculado con un robo porque en la vivienda "falta una cajita donde la mujer guardaba dinero", aunque aclaró que más allá de una silla caída, no se halló "nada revuelto" y que el asesino ingresó "sin forzar nada", lo que hace presumir a los pesquisas que la víctima conocía a su agresor y le permitió el acceso a la casa.

Indicaron además que en la casa fueron encontrados tanto el celular de la víctima como cadenitas de plata, que no fueron robadas pese a estar a la vista.