Violencia es mentir: a 26 años de la prohibición de los Redondos en Olavarría

Un hecho que quedó marcado en la historia del rock nacional por la prohibición a una banda en plena democracia y por la conferencia de prensa que dio el grupo.

15 de Agosto de 2023 18:36

Pocas fechas son tan recordadas en la historia del rock nacional como la del 15 de agosto de 1997: ese día el entonces intendente de Olavarría, Helios Eseverri, prohibió los conciertos que Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota iba a dar en el Club Estudiantes, en el marco de la gira que la banda estaba haciendo por distintas localidades del interior para presentar su disco, "Luzbelito". Con miles de pibes que ya habían llegado a la ciudad y otros que estaban viajando, la situación cobró relevancia nacional y motivó la inédita conferencia de prensa de los Redondos, encabezada por su líder, Indio Solari. Pasaron 26 años de aquel día.

Luego del asesinato de Walter Bulacio en 1991, quien fue "levantado" por la policía de la puerta del estadio de Obras Sanitarias en Capital Federal y apareció muerto a los pocos días; y tras las presentaciones con algunos problemas por desbordes en Huracán en 1993 y 1994, en la gira "Lobo Suelto Cordero Atado", los Redonditos empezaron un camino alejado de la ciudad de Buenos Aires para evitar ese tipo de situaciones, al tiempo que la masividad de la banda crecía cada vez más. Los años del neoliberalismo en la década del '90 dejaron a decenas de miles de pibes y pibas por fuera de un sistema cada vez más chico, y Los Redondos fueron para esos jóvenes una red de contención, algo que los convocaba y los cautivaba. Que los hacía sentir parte de algo. ¿Cómo no sentirse así?

La Conferencia de Prensa de Los Redondos en Olavarría en 1997.

 Para 1996 la banda de Indio Solari y Skay Beilinson editaron su séptimo álbum de estudio: "Luzbelito", un disco oscuro y con un concepto, un hilo conductor sombrío, que rápidamente sedujo a los ricoteros. El sonido era de lo más acabado que la banda había presentado hasta el momento y para algunos es considerado como el mejor de los trabajos de Los Redondos, o uno de los mejores junto al icónico "Oktubre", de 1986. Más allá del tono sombrío y lúgubre del disco, también se destacaban temas inéditos que llegaban a la edición como el "Blues de la Libertad" y "Mariposa Pontiac - Rock del País", este último un verdadero hit que trascendió al mundo redondo y sonó en todas las radios de la época.

La gira de presentación de Luzbelito dio inicio en Mar del Plata, los días 7, 8, y 9 de junio del '96, con 3 fechas a sala llena en Go! Disco (hoy Gap) de Constitución y Ortega y Gasset. El tour continuó en L'étôile Disco de San Carlos, en Santa Fe; de vuelta en Mar del Plata pero en el Polideportivo Islas Malvinas el 26 y 27 de octubre de 1996; regreso a Santa Fe el 28 de diciembre (fecha ricotera si las hay); una vez más en Mar del Plata el 8 de marzo de 1997; y el 14 de junio de 1997 Luzbelito recaló en el Anfiteatro Municipal de Villa María, Córdoba. Durante todas las presentaciones la cantidad de gente que quería asistir a los conciertos siempre era superior a la que tenía la entrada y de ahí que se danban algunos desbordes, corridas y algún que otro choque con la policía a la que los ricoteros siempre recordaban en uno de sus cantitos más conocidos: "yo sabía, yo sabía, que a Bulacio lo mató la policía", con la herida aún abierta por el asesinato de Walter.

El "flyer" de la presentación de Luzbelito en Go! de Mar del Plata.

El boca en boca, la manera más habitual de enterarse que iban a tocar los Redondos en aquellos años, decía que Luzbelito llegaba a Olavarría en la continuidad de la gira, y la cita era en el Club Estudiantes el 16 y 17 de agosto de 1997. La fecha era muy esperada ya que marcaba el regreso a la provincia de Buenos Aires y un lugar equidistante de ciudades como Mar del Plata, Capital Federal y Bahía Blanca, entre otras, y la facilidad para viajar desde otros lugares de la Argentina. Para ese momento Los redondos eran sin dudas la banda más convocante de la escena. Pero los incidentes aislados que se venían registrando en las presentaciones de la gira tenían preocupadas a las autoridades de Olavarría.

La gente que iba a ver a Los Redondos lo hacía desde distintos lugares; de muchas ciudades de la provincia de Buenos Aires, una gran presencia de Capital y Gran Buenos Aires; pero también llagaban bandas del interior del país, de Córdoba, Santa Fe y el litoral, gente de la Patagonia; y algunos pocos de los países limítrofes, generalmente de Uruguay. Ya en esa época el rango etario era amplio: para finales de los '90 Los Redondos ya tenían algo más de 20 años de trayectoria en el lomo y unos pocos peligros no tan sensatos. La denominada "Misa Ricotera" ya contaba con los traslados en bondis o trenes y las grandes previas, los cánticos, alcohol y otras yerbas. Esa banda inconsolable que se hacía familia y hermandad, y que por algún motivo (un montón) encontraba en Los Redondos un estilo de vida

La entrada de Los Redondos tenía la imagen del subcomandante Marcos.

Patricio Rey era desde sus inicios una producción independiente, por fuera del circuito de las bandas de la época y también del ámbito de las compañías discográficas. Todo era hecho por Los Redondos, los discos y también los shows. El productor de aquellas fechas en Olavarría era Pablo Baldini, quien junto a Solari, Beilinson y la Negra Poli (ingeniara psíquica y manager de la banda) tenían todo aprobado, los permisos, habilitaciones y tasas correspondientes para la realización de las dos fechas en la ciudad. Sin embargo, amparado en un informe policial y extractos de medios de comunicación, a un día de la primera presentación, el intendente radical Helios Eseverri decidió la prohibición de los recitales de los Redondos, con miles de jóvenes en las calles de Olavarría y otros tantos en viaje desde distintos puntos de la provincia, el país y algunos países limítrofes como Chile y Uruguay.

La decisión del jefe comunal causó un escándalo tal que la noticia rápidamente se masificó y tomó la atención de los medios nacionales que no tardaron en estigmatizar a la banda y, sobre todo, a los seguidores. En particular, las bandas que venían del conurbano eran las acusadas por la "opinión pública" como las responsables de generar incidentes, robos y todo tipo de situaciones que podían poner en peligro la paz de un lugar tan apacible como Olavarría. Tal información era por demás exagerada. Lo que sucedía en esas presentaciones de Los Redonditos de Ricota no distaba mucho de lo que podía pasar (y sigue pasando) en cualquier aglomeración de miles de personas. 

Los miles de pibes y pibas que ya estaban en Olavarría armaron una manifestación en la zona de la Municipalidad y una vigilia en la puerta del hotel en el que estaban los músicos. Nadie se quería ir hasta que toquen Los Redondos, y miles estaban en camino. Hubo quema de algunas cubiertas y una suerte de piquete en pleno centro olavarriense. Pareció mucho peor el remedio que "pensó" Eseverri, que generó con su decisión un caos en la ciudad que decía proteger. Incluso comerciantes de Olavarría se mostraron en contra de la medida porque se esperaban miles de personas que iban a comprar, comer y alojarse en la ciudad y era una excelente oportunidad.

La situación planteada motivó un hecho completamente inédito, algo que nunca había sucedido hasta el momento: Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota brindaron una histórica conferencia de prensa en el hotel céntrico en el que los miembros de la banda estaban parando para los conciertos. Lo inédito se basaba en que los Redondos nunca habían estado en la "tele" y sólo realizaban alguna nota radial o escrita en ocasiones en que presentaban un disco, "como para agregar algún concepto estético", según señaló el propio Solari más de una vez. Fue así que Indio Solari, Skay Beilinson y la Negra Poli, junto con el resto de los integrantes de la banda, Walter Sidotti, Semilla Bucciarelli y Sergio Dawi, se sentaron delante de las cámaras y micrófonos por primera vez.

"Queremos arrancar pidiéndoles disculpas a los chicos que están afuera. No se nos ha ocurrido una manera mejor de acercarles nuestro cariño que esta. Estuvimos hasta último momento esperando una circunstancia que desanudara este lío", fue lo primero que dijo Solari al dar inicio a la conferencia y continuó: "por algún motivo, que yo me atreveré a decir de índole puramente burocrático y, desconociendo un poco la realidad, decidió el señor intendente con un decreto la prohibición del espectáculo que íbamos a dar". "Estamos con la tranquilidad de haber venido a este pueblo a hacer un show, habiendo cumplido con todos los requisitos en tiempo y forma para que el recital fuera una fiesta que es lo que acostumbra a ser" señaló el Indio quien en aquella ocasión no sólo explicó pormenorizadamente la situación y dio respuestas a los periodistas presentes, sino que también dejó frases que se inmortalizaron como "Ya tenemos la suficiente edad para que, en lugar de bajarles líneas a los chicos, escucharlos, porque en sus nervios hay más información del futuro que la que tipos de nuestra edad puedan tener para aconsejarles".

Esa fue la primera y última vez que Los Redondos e incluso Indio Solari en su carrera como solista se expusieron ante las cámaras en vivo para todo el país. Los shows no se realizaron y la fecha se pospuso para el 4 de octubre en Tandil, ciudad que luego se transformó en un clásico de las presentaciones de Indio y los Fundamentalistas del Aire Acondicionado. El tiempo y el destino quisieron que veinte años después de la prohibición el Indio y su proyecto solista volvieran a Olavarría para el concierto más masivo de su carrera el que que se calcula que asistieron entre 350.000 y 400.000 personas. Esa fue también la última presentación del Indio Solari en un escenario ante su público