Cierre de Inadi en Mar del Plata: "Es un retroceso social"

El cierre definitivo del Instituto contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (Inadi) fue anunciado este jueves por parte del vocero presidencial, Manuel Adorni, como parte de la reducción de la estructura estatal decida por el presidente Javier Milei.

Desde Mar del Plata, distintos sectores rechazaron la medida por considerarla un avasallamiento contra los derechos básicos humanos y criticaron duramente al mandatario nacional.

"Sin dudas, esto significa un retroceso a nivel social de la aplicación y prevención de todas las políticas que se consiguieron. Es un instituto pionero en el mundo y tenemos que recuperar todo lo que trabajó la sociedad para lograr los avances que hoy tenemos y las leyes que tanto nos costaron", explicó en dialogo con 0223 la exfuncionaria de la Delegación regional Mar del Plata de Inadi, Claudia Vega.

Con respecto a esas políticas, Vega sostuvo que "desde 1995 (cuando fue creado el instituto) y 1997 (cuando se puso en ejecución) a esta parte, se han incorporado distintas leyes que han otorgado derechos a muchos espacios de la sociedad que no los tenían", y agregó: "La tarea fundamental del Inadi era preservar que la aplicación de esas normas fuera libre de discriminación".

La exfuncionaria explicó que se verán afectados distintos sectores cuyos derechos tenían alcance: una persona con discapacidad, alguien con diversidad corporal que tenía acceso a la Ley de Talles, celíacos que contaban con la posibilidad de tener garantizados sus productos en cada uno de los establecimientos que venden alimentos, personas con desigualdad de condiciones laborales ya sea por relaciones sexo genéricas o identidad, e incluso gente con dificultad en la accesibilidad que no podía tomar un colectivo. 

"Hoy ya no se garantizarán esos derechos. La gente no tendrá adónde recurrir frente a un hecho de discriminación", lamentó Vega. Si bien el organismo no era punitivista, podía realizar dictámenes de relevancia pero, sobre todo, realizaba un fuerte trabajo de prevención.

"Había muchas líneas de trabajo en escuela, trabajo y territorio sin discriminación. La mayor tarea del Inadi es la mirada territorial, ya que se nutre del trabajo de las delegaciones que tienen la posibilidad de llevar el derecho al contacto con las calles. Hay talleres en cada sindicato, establecimiento educativo y entes, que permiten trabajar interseccionalmente y abrir canales para resolver mediante distintos mecanismos los conflictos de forma local", puntualizó la exdelegada, quien detalló que muchas veces se podían derivar casos que no eran necesariamente denuncias o discriminación, a otros organismos como Desarrollo Social o el espacio de Mujer, Género y Diversidad.

"Podríamos mejorar, pero la respuesta no es cerrarlo. En Mar del Plata, en promedio atendíamos como mínimo 3 casos por día, y muchos más en los operativos. En un 80% los llevábamos a mediación o con intervenciones en talleres. Y los resultados de la falta de prevención los vamos a ver en los próximos años. Es necesario fortalecer el trabajo del organismo, ampliarlo, dotarlo de personal idóneo, y de presupuesto; jamás cerrarlo", enfatizo Vega.

ATE se sumó al rechazo

Desde la Asociación Trabajadores del Estado Seccional Mar del Plata (ATE) se sumaron, mediante un documento, al repudio por el cierre del organismo. "Entendemos aberrantes las descalificaciones expresadas por el vocero presidencial Manuel Adorni en cuanto a los alcances y servicios que ofrece dicho organismo", agregaron.

En ese sentido, manifestaron una "profunda preocupación ante la continuidad laboral de los trabajadores que integran el instituto": "Desde siempre ATE sostiene que los servicios ofrecidos por cada una de las instituciones del Estado están garantizados por sus trabajadores, quienes hacen la diferencia en la calidad y el compromiso detrás de los vínculos que generan con sus comunidades. Entidades como el Inadi poseen un rol central en la consolidación de dichos vínculos, aportando herramientas y recursos no sólo para una mejor convivencia en democracia, sino por el carácter profundamente social de los principios que sostienen sus políticas".

Por su parte, desde el gremio subrayaron que se trata de un "atropello a derechos ciudadanos consagrados por parte de actual gobierno esconde una intención mayor: desviar la atención sobre la cruda emergencia alimentaria, sanitaria y habitacional que precariza las condiciones de vida de más de la mitad de nuestra población, sumida en niveles de pobreza nunca antes conocidos en la historia nacional".