El Ejecutivo apuntó al “sinceramiento de precios” por el fuerte aumento que habrá en el boleto

A través de un informe donde estableció que la tarifa técnica del boleto del transporte urbano de pasajeros debería ser de $690,97, el gobierno responsabilizó al “sinceramiento de precios” y a la inflación de los últimos meses por el fuerte aumento que se vendrá en las próximas semanas en la tarifa.

“La política fijada por el gobierno nacional conllevó la fijación de un nuevo equilibrio relativo de precios. Dicho proceso, en el rubro de transporte, implicó un incremento de la mayoría de las variables que ha impactado en la estructura de costo”, sostuvo el reporte de la Dirección de Transporte que este lunes será analizado por la Comisión de Movilidad Urbana, en el marco del pedido de las empresas para llevar el boleto a $854,46.

Entre las variables destacó principalmente al aumento del combustible, el cual “ha evidenciado un incremento sustancial en su valor, impactando directamente en la estructura de costos toda vez que representa el 22,5% del total”. Asimismo, los costos fijos de personal en su totalidad representan entre el 34 y 35% del total del valor, “que se encuentran en plena negociación paritaria”, advirtió el Ejecutivo. En tanto, el costo del servicio SUBE ha sido incrementado por el Ministerio de Transporte de la Nación de un 4% al 7% más IVA mediante Resolución 453/2023.

A su vez, “indirectamente el incremento de la cotización del dólar oficial supone un cambio en el costo de las unidades 0 Km, afectando en gran medida a la amortización de las mismas según el procedimiento de cálculo prefijado”.

“En síntesis, el sinceramiento de dichos precios, sumado a la inflación de los últimos meses, ha generado un incremento extraordinario en dichas variables disparando el valor de la tarifa técnica desde los 317,21 calculados a noviembre 2023 hasta los $690,97 calculados en el presente estudio”, resaltaron desde el gobierno municipal.

Subsidios y demanda

Por otro lado, el Ejecutivo volvió a remarcar el cada vez más limitado impacto de los subsidios en el valor de la tarifa, lo que se combina con un sistema que aún no recuperó la cantidad de pasajeros que supo tener antes de la pandemia. “La permanencia de un escenario de crisis nacional del sector y la reducción relativa de los subsidios provinciales y las compensaciones nacionales, derivada del no acompañamiento de las tasas acumuladas inflación de la economía y su impacto sobre la tarifa, son el denominador común de los sistemas de Transporte Público Colectivo de las distintas ciudades del interior de Argentina”, expuso Transporte.

Previo a la pandemia, la demanda ascendía a 2,48 pasajeros/km y luego cayó a 1,93 pasajeros/km entre marzo 2020 y enero de 2023; mientras que ente febrero de 2023 y enero de 2024 subió a 2,30 pasajeros/km.

En tanto, de un costo kilométrico total de $ 1874,49 (aumento del 110,88% respecto de los $ 888,87 calculados en la obtención de la tarifa vigente), “sólo $ 283,53 serían asumidos por los subsidios/compensaciones (incluidos los correspondientes a créditos fiscales) y los restantes $ 1590,96 los pagarían los usuarios mediante una tarifa de $ 690,97 (Tarifa plana = 1590,96 $/km / 2,30 pasajeros/km = 690,97 $/pasajero)”.

Como resultado de este escenario general, las variables de cálculo de la tarifa técnica en el período anual adoptado para este informe son: un volumen de demanda de 66,74 millones pasajeros pagos; una distancia anual recorrida de 28,99 millones km; un IPK (Índice Pasajero por Kilómetro) medio de 2,30 pasajeros/km. “En función de ello es posible concluir que, al igual que en anteriores cálculos de la tarifa técnica, el sistema continúa inmerso en un ´desequilibrio financiero´, derivado del IPK y, a la caída relativa de los subsidios y compensaciones en relación al proceso inflacionario”, añadió.

Como conclusión, el gobierno remarcó que “esto produce un paulatino y sostenido trasvase de costos del sistema hacia la tarifa que debe asumir el usuario, por lo tanto, se reitera la imperiosa necesidad de su recomposición a fin de evitar el agravio comparativo existente entre los sistemas de transporte del interior del país y el Área Metropolitana de la CABA”.