Florentina Peralta: “Como el teatro, el juego es lo que nos conecta con otros”
Praxis es una cooperativa de formación teatral. Sus seis miembros son profesores de teatro y buscan en él una experiencia compartida. El taller de Juego Teatrales es un espacio donde se libera el cuerpo de las presiones y prejuicios diarios para dar lugar a lo lúdico.
Mucho antes de conformarse como cooperativa, la escuela de formación teatral Praxis ya sabía por dónde quería transitar su camino. Comenzaron en 2016, pero recién en 2021 empezaron a gestionar la cooperativa. Así tomó forma Praxis, bajo el manifiesto que dice: “Hacia un teatro de grupo”.
Más allá de los papeles, el grupo siempre trabajó bajo ese formato. Florentina Peralta fue la última en sumarse a los otros cinco participantes y explica que, “Veníamos haciéndolo porque creemos que es una forma, más en estos tiempos, que puede abarcar nuestra postura sobre el teatro. Creemos todos que el teatro es así y nosotros hacemos un teatro de y en grupo. Creemos en lo colectivo y en la paridad. Entonces, a la hora de organizar nuestro trabajo, lo pensamos así, desde un formato de cooperativa”.
Conformada oficialmente la cooperativa, comenzaron una etapa de reconocimiento de otros grupos bajo el mismo formato, así como la relación con espacios que funcionaban de igual manera, con los que empezaron a pensar proyectos en paralelo. “Así, empezamos a vincularnos de otra manera. Nosotros ya veníamos trabajando previamente como una cooperativa, de forma horizontal, con reuniones mensuales y toma de decisiones desde lo colectivo, pero siempre pensando en poder ampliar y compartir nuestro conocimiento. Todos nosotros somos profesores de teatro y lo interesante es que cada uno o una tiene una formación distinta, venimos de lugares distintos, entonces, cada uno o una tiene algo distinto que aportar. Desde lo subjetivo y desde el recorrido previo, compartimos con todos todo. Creemos que el trabajo del teatro es de grupo y que invita a reflexionar a que otros y otras se sumen. Entonces, desde ahí, también empezamos a conformar la formación actoral. Una formación que dura cuatro años, donde se van viendo contenidos distintos para llegar al último año donde se realiza una producción teatral integral”, cuenta Florentina.
Por supuesto que en esa decisión también hay algo político. Algo que los identifica a los miembros de la cooperativa. Una convicción de que esa forma, y en estos momentos, es la más amable, la más empática y la que más va con los principios y posturas de los integrantes.
La actriz reflexiona, “Ahora estamos, claramente, en un momento complejo y nos preguntamos: ¿Qué hacemos? ¿Tiene sentido seguir sosteniendo esto? Y todos y todas dijimos que sí. Que hay que seguir sosteniéndolo, porque es lo que tenemos junto con el deseo de que esto también se siga replicando en otros, que otros puedan animarse a dar el paso. Nos parece que es algo hermoso poder trabajar colectivamente y siempre pensando en esos otros y otras. Es, también, una forma de resistencia”.
Por Praxis ya han pasado más de 500 estudiantes, no solo por su formación actoral, sino también por los distintos talleres que lo complementan, como taller de teatro para adolescentes con experiencia, otro del cuerpo para la escena o el de juegos teatrales para adultos, entre otros.
-Me da la sensación de que en el taller de juegos teatrales, los que se acercan van con una intención más allá de la carrera actoral. ¿Puede ser que se busque también algo de liberación con el cuerpo, darle otro uso?
- Claramente. El espacio de juegos teatrales no se elige para una formación. La gente que va al taller es para liberarse, para encontrarse, para bajar un poco y para conectar con la risa y con el juego. Es muy interesante lo que pasa. Hoy vivimos en un mundo donde todo lo que hacemos tiene que ser productivo y este espacio es un espacio distinto. Nos invita a jugar, a encontrarnos con personas que no conocemos y que, de pronto, estamos haciendo un ejercicio con ellos que nos lleva a romper con nuestras limitaciones. Yo trabajo mucho desde la corporalidad, obviamente siempre desde el juego, que es el que nos permite ablandarnos un poco.
- Claro, cuando uno crece olvida y deja de jugar con lo lindo que es….
- Exacto, la mayoría de las personas crece y deja de jugar. Pero cuando volvés a jugar de adulto o adulta, te das cuenta de que es lo que nos encuentra con otros, que es lo que nos hace humanos, que es lo que nos hace romper prejuicios y lo que nos libera. Es realmente muy hermoso y es más hermoso escuchar a los que participan. Nosotros tenemos un cuaderno donde registramos cosas que nos pasan y cada clase se lo lleva alguien distinto. Y este año, más que nunca, empecé escuchar o a leer que todos y todas los que se llevaban el cuaderno de bitácora decían: “Esto me vuelve a conectar con mi niño o niña interior, vuelvo a reír, vuelvo a explorar y a tener la mente creativa”.
Visiblemente es un espacio elegido para liberarse del día a día, de las presiones y los prejuicios. Pero también es un espacio donde la creatividad tiene su lugar. Con y desde el juego, al final se busca una instancia de improvisación, que son las primeras entradas a la actuación, donde uno se sorprende de sí mismo.
“Hay un sistema que invita a juzgarnos todo el tiempo, desde ahí, y de ese miedo, nos dominan claramente. Entonces, la propuesta es tan lúdica, y entrás tan en esa, que dejás de juzgarte y terminás la clase pensando en todo lo que hiciste y que nunca creíste que ibas a hacer. Es muy liberador”, aclara Florentina.
En tiempos como estos es mucho más difícil que se sume gente nueva, pero también, en muchos casos, tanto como mantener a la que ya está. Pero, más allá de las circunstancias, Praxis continúa y refuerza la apuesta, porque ve en el teatro una salida, una resistencia y una forma de compartir. Cierra Florentina en nombre de los miembros de la cooperativa: “El teatro, y es lo que me enamoró de él y lo que me sigue maravillando, trabaja siempre desde la escucha, desde la comunicación, o por lo menos el teatro que en Praxis pregonamos. Esto de mirar a esa otra persona, de darle valor a la mirada, al contacto, a la confianza. Darle valor a la palabra y al cuerpo. Un cuerpo que siempre queda para lo último. Y, si hay un cuerpo, es un cuerpo que se entrena, tipo fitness, y hay que cuidarlo. Pero desde lo estético o desde la salud, pero nunca es un cuerpo expresivo, uno que cuenta, que dice, que expresa. Un cuerpo que sale del cuerpo cotidiano y se amplía al campo de lo expresivo”.
La cooperativa de formación actoral retoma sus talleres el próximo 31 de julio en el Centro Cultural América Libre. Praxis continúa con su idea de resistencia en base a un teatro de grupo, colectivo, porque sienten que la potencia está en la grupalidad y que todos y todas tienen algo para aportar.
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