El día que Maradona pidió una paella y paralizó Mar del Plata

Durante muchos años, uno de los eventos más importantes que vivía Mar del Plata cada temporada era el Torneo de Verano. Un certamen no oficial que cruzaba a los cinco grandes del fútbol argentino (Boca, River, Racing, Independiente y San Lorenzo) en el estadio José María Minella.

En ese contexto, durante una noche de calor en la ciudad, Diego Armando Maradona llegó al Hotel Costa Galana cuando la cocina ya estaba cerrada y pidió una paella. Si bien el jamás se enteró, generó una revolución en la ciudad.

En las últimas horas, las autoridades de este complejo Matías Basanta Álvarez y Claudia Álvarez Argüelles dieron detalles de aquel episodio durante una charla con La Nación.

"En las temporadas de verano se jugaban partidos de exhibición. Tenía una convocatoria increíble. Estaba planificada una cena en determinado lugar pero cambian los planes y regresa luego del partido, pasada la medianoche, al hotel Diego con toda su comitiva", sostuvo el director del hotel.

"Se encontraba mi abuelo en el lobby y le solicitan una paella", dijo, y continuó: "Naturalmente la cocina estaba cerrada. Pero inmediatamente le dicen 'Cómo no, por favor, accedan al salón' y todo el equipo lo miraba como diciendo 'Cómo lo vamos a resolver?' porque no teníamos ni paella, ni cocina a la una de la mañana". 

Asimismo, Matías Basanta Álvarez continuó: "Rápidamente hace un guiño con el metre para que les den sala, para que los puedan recibir con alguna entrada y le dice 'Claudita acompañame'.

"Claudia (NdR Villafañe, pareja del astro en ese entonces) me dice 'acompañame'. Salimos por la salida de servicio del hotel Iruña. Yo no sabía a dónde iba. Me dice 'cuidame la puerta' y él se fue a la vuelta, que estaba el restaurant Chichilo, que ahora ya no está", agrega Claudia Álvarez Argüelles.  

De acuerdo al relato de la empresaria, Maradona "va a Chichilo y le pide la paella, que era una de sus especialidades. Él había llevado la fuente nuestra del hotel, la trae bien tapadita, subimos la paella y se sirvió en nada porque Chichilo, como la tenía permanentemente en producción, no hubo que esperar los 30 minutos que se espera una paella".

"Maradona alucinado", agregó Matías para cerrar la anécdota con el periodista José del Río.