Trágico: un motociclista y un nene de 12 años murieron en un impactante choque múltiple en la ruta

Un trágico choque en cadena sobre la Ruta Nacional 9, a la altura de la localidad de Mojón en la localidad santiagueña de Silípica, acabó con un saldo de dos muertos, entre ellos un niño de 12 años que viajaba como acompañante en una moto con su padre. Cerca de las 4 de la madrugada, personal de la Comisaría 37 de Árraga tomó conocimiento de que, a la altura del kilómetro 1111, se había registrado una colisión en cadena.

Al arribar al lugar, los oficiales encontraron un auto Ford Fiesta, en el que se desplazaba Lorena Alagastino, de 53 años, residente en San Isidro. A raíz de la violencia del impacto, quedaron atrapados los choferes de un colectivo y de un camión que venía por detrás. En ese contexto, los bomberos voluntarios tuvieron que trabajar para poder rescatarlos.

A pocos metros había una moto Honda XR sobre el pavimento y, en las inmediaciones, se encontraba sin signos vitales Diego Agustín Torres, de 42 años y aparente conductor del vehículo; Silvia Torres, de 41 años, también había estado a bordo del rodado y presentaba graves heridas. Mientras llegaban las ambulancias, los efectivos hallaron también una moto Honda Biz sobre la calzada.

En aquel vehículo viajaba Carlos Herrera, de 42 años, en compañía de su hijo, Benicio, de 12, quien también perdió la vida a raíz del accidente. A su vez, en la banquina y metido entre los pastizales había un automóvil Volkswagen Gol Trend, que había sido manejado por Ramón Díaz, de 44 años. Allí, los paramédicos confirmaron la muerte del menor de edad y de Torres, mientras que los otros motociclistas fueron trasladados de urgencia al Hospital Regional.

Si bien hasta el momento se desconocen los motivos del fatal siniestro, Alagastino contó que estaba estacionada cuando escuchó un impacto en la parte trasera de su coche. Cuando la mujer se acercó a ver qué sucedía, notó que en sentido contrario el Gol chocó a las motociclistas, siendo una de estas últimas la que colisionó contra su rodado.

La Policía llevó a cabo in situ una serie de test de alcoholemia y se supo que Díaz tenía 2,72 gramos de alcohol por litro de sangre, mientras que Herrera contaba con 0,11 gramos de alcohol. Por orden de la fiscal Silvia Jaime, Criminalística realizó los trabajos de rigor, mientras que los cadáveres fueron trasladados a la morgue.