Suba del boleto: a pedido del radicalismo, el proyecto queda en comisión

La idea del oficialismo de dar un tratamiento acelerado al proyecto para fijar una nueva suba del boleto de colectivo en Mar del Plata sufrió un traspié inesperado este martes en la comisión de Legislación. Dos concejales radicales expusieron sus críticas hacia la iniciativa y si bien no forman parte de la comisión sus votos eran claves para que el incremento no pueda ser aprobado en la sesión del Concejo Deliberante. Así, a pedido del radicalismo el expediente quedó en comisión y será tratado el próximo lunes con la presencia del secretario de Gobierno, Alejandro Vicente. 

Mario Rodríguez había expresado a través de un comunicado que esperaba que la decisión la tome el intendente Carlos Arroyo, luego de que la semana pasada se manifestara abiertamente en contra de un incremento de la tarifa, tal como habían planteado los empresarios.

A esa postura se sumó el concejal radical Luis Rech, a través de una publicación en la red social Twitter, en la que también habló de la necesidad de que sea el jefe comunal quien se pronuncie sobre el tema.

En ese marco, la Comisión de Legislación trató este martes el expediente. Ante las idas y venidas de los concejales, fue la radical Cristina Coria quien planteó la idea de que el proyecto quede en la comisión hasta el próximo lunes. Los bloques del Frente para la Victoria y Acción Marplatense, que habían rechazado la suba en la Comisión de Transporte, y el Frente Renovador (se había abstenido) acompañaron el pedido. 

Los concejales plantearon que el proyecto no sólo debe discutir la suba de la tarifa (pasará a $6,86), sino que también es tiempo de debatir el servicio que brindan los empresarios. 

Lo llamativo del caso es que Coria el lunes había defendido la suba y fue el propio Nicolás Maiorano (a distancia, porque no está en Mar del Plata) quien pidió que se convoque para este martes a la comisión de Legislación exclusivamente para tratar este expediente. Esta situación deja al desnudo las debilidades que presenta el frente Cambiemos, conformado entre la Agrupación Atlántica-Pro y la UCR. 

Esta situación abre la puerta a una medida de fuerza por parte de la UTA, dado que los empresarios habían advertido que si no se avanzaba con el expediente con celeridad iban a suspender el servicio nocturno de colectivo con el objetivo de abaratar costos en personal.